Ayuso intenta introducir en la Conferencia de Presidentes los temas que renunció a tratar con Sánchez en La Moncloa

El Gobierno de la Comunidad de Madrid, que preside Isabel Díaz Ayuso, dirigió el lunes, a través de su consejero de Presidencia, Miguel Ángel García Martín, una carta al ejecutivo central en la que proponía tratar cuatro asuntos en la próxima Conferencia de Presidentes, en principio programada para diciembre en Cantabria: financiación autonómica, la llegada de migrantes, el problema del acceso a la vivienda y la falta de sanitarios. Ese mismo día, la baronesa conservadora rechazó verse con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, este viernes en La Moncloa, renunciando así a tratar esos temas y cualquier otro específico de Madrid. La líder del PP había reclamado previamente a sus homólogos conservadores que ellos tampoco trataran con el presidente del gobierno los asuntos que ella quiere tratar en la Conferencia de Presidentes, al juzgar que tienen carácter nacional y que, por tanto, no deben debatirse en una cita bilateral.

No obstante, ningún portavoz conservador ha desvelado qué orden del día hubiera considerado adecuado el PP de Madrid para la reunión con el presidente del Gobierno.

“En cuanto a los temas a incluir [hemos pedido] el sistema de financiación autonómica”, ha dicho este miércoles el portavoz gubernamental, García Martín, que el próximo lunes representará a Madrid en el comité preparatorio de la conferencia. “En segundo lugar, pedimos que se aborde el control de la inmigración ilegal, y se ponga freno al caos migratorio que se está viviendo en nuestro país”, ha seguido. “También queremos que se incorporen a la Conferencia el acceso a la vivienda y la seguridad jurídica, nos gustaría que se derogara la ley de vivienda y que se desarrolle una ley contra la okupación”, ha añadido. “Y por último, habría un cuarto tema relacionado con el déficit de personal sanitario en el sistema nacional de salud”.

Ayuso ya reclamó en septiembre a los barones del PP que todos esos temas no se trataran en sus reuniones bilaterales en La Moncloa con Sánchez, sino en el foro multilateral de la Conferencia de Presidentes. Este cónclave también ha sido motivo de enfrentamiento entre los dos líderes.

Primero, porque Ayuso anunció en 2021 que no acudiría más veces a la convocatoria si esta no se realizaba con la suficiente antelación: el reglamento establece que el orden del día debe conocerse 20 días antes de la celebración de la cita. Y segunda, porque este verano llevó a Sánchez hasta el Supremo para forzar que se produzca la reunión, como hicieron el resto de gobiernos autonómicos del PP, en una acción coordinada por la dirección nacional de Alberto Núñez Feijóo.

El reglamento que regula las conferencias de presidentes dice lo siguiente en su artículo cinco. Primero: “El orden del día de la Conferencia de Presidentes será fijado por el Comité preparatorio con la conformidad de su Presidente y de diez comunidades autónomas o ciudades con Estatuto de Autonomía”. Y después: “La aceptación de la inclusión de los nuevos asuntos en el orden del día requerirá el voto afirmativo del Presidente del Gobierno y diez comunidades autónomas o ciudades con Estatuto de Autonomía”.

No obstante, la clave de bóveda del choque entre PP y PSOE sigue siendo la financiación autonómica, en una doble vertiente. Por un lado, el proyecto de que se reconozca la singularidad de Cataluña, como pactaron los socialistas con ERC para conseguir la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat catalana. Y por otro, la quita de la deuda que ha planteado el ejecutivo para esa región y el resto.

El Gobierno de Ayuso quiere que la Conferencia de Presidentes siente las bases para discutir los detalles del nuevo sistema en el consejo de política fiscal y financiera, y defenderá que se mantenga la autonomía de cada región para seguir decidiendo sus políticas, con el objetivo, ha recordado su portavoz este miércoles, de seguir haciendo rebajas fiscales.