“No queremos una medallita para nuestros hijos, queremos una educación de calidad”

“No a mis hijos, no en plena campaña electoral y no por parte de un Gobierno que está desmantelando la escuela pública” es lo que han respondido los padres del colegio público madrileño Palacio Valdés, en el paseo del Prado, a un tiro de piedra de Caixaforum y del extinto Medialab, a la presidenta de Madrid. Isabel Díaz Ayuso anunció el 22 de mayo que el Consejo de Gobierno había concedido “a todos los niños de la región la Gran Cruz de la Orden del Dos de Mayo”, un reconocimiento que, con motivo del día de la autonomía, Ejecutivo autonómico otorga a personas o instituciones “con conductas ejemplarizantes que han destacado por su servicio a la ciudadanía” y que este año comparten con Rafa Nadal. Sin embargo, no a todos les parece bien este gesto y menos, a dos días de las elecciones del 4 de mayo.

“Los niños han sido el sector más maltratado en la pandemia. Les dijeron que eran supercontagiadores, que eran un peligro para sus abuelos, les cerraron los parques y los encerraron dos meses en casa, a los más humildes hasta les dieron menús de Telepizza... y, ahora, ¿quieren darles una medallita? Es pura hipocresía, de chiste”, explica una vocal del AMPA, que prefiere no dar su nombre y apellidos porque se trata de una acción colectiva de todos los padres del centro.

Todo comenzó antes de Semana Santa, cuando una familia contactó con el AMPA del Palacio Valdés ―un centro pequeño, de una clase por curso, al que acuden unos 200 niños de infantil y primaria― para contarles que le había llegado, dentro de la agenda del cole, una circular con sello de la Comunidad en la que se les pedía permiso para que el menor participara en una grabación, que será emitida en la entrega de la cruz. “Un vídeo con niños el 2 de mayo y el 4 de mayo elecciones, el cierre de campaña perfecto”, opina la asociación, a la que se remitieron otros cuatro padres más “con el mismo problema”. Los padres alegan otras cuestiones de fondo más allá de la cita con las urnas: “No queremos que se use a nuestros hijos con fines propagandísticos por parte de una Administración que lleva años desmantelando la educación pública, quitando recursos, recortando presupuestos y reduciendo plantillas. No queremos medallitas, queremos una educación pública de calidad y con recursos, y que sea una prioridad venga quien venga el 5-M”.

“Ninguno de los cinco padres quería que su hijo participara en un vídeo electoralista, así que decidimos emitir un comunicado de rechazo”, prosigue la madre, que admite que “en el colegio hay padres de todas las sensibilidades y no el 100% está de acuerdo”. Pero el “gesto simbólico de repulsa” se decidió por mayoría en una junta en la que no hubo, en todo caso, ningún voto en contra, aunque sí alguna abstención.

El viernes colgaron la nota en Twitter para “llevar a cabo una acción de mayor calado” y de momento se han unido a su causa 18 AMPA de colegios de los distritos Centro y Hortaleza de la capital, como el Méndez Núñez y el Luis Cernuda, de Coslada, como el William Shakespeare, y entidades como la Plataforma Escuela Pública de Getafe, Familias por la Escuela Pública de Vallekas y Plataforma por la Escuela Pública de Usera, así como la Confederación de AMPAS y FAPAS de Madrid (Confapa). Vicente Leal, presidente del AFA del Vázquez de Mella, uno de los adheridos, indica que toda su junta estuvo de acuerdo. “Independientemente del signo político, no es de recibo que se use a los niños con unos fines tan evidentes”, subraya, para criticar que se quiera dar una “condecoración y hacerse la foto mientras se recorta más y más”. A su juicio, deberían conceder la medalla a los 500 niños de la Cañada Real que llevan meses sin luz y sí que merecen un reconocimiento y que se les devuelva. “Pero ahí no han ido a grabar”, ironiza.

“Vamos a esperar unos días más, porque hay dos o tres asociaciones más que se quieren sumar, y lo presentaremos en registro el viernes”, añade el AMPA del Palacio Valdés. El centro, a pesar de las llamadas de este diario, no ha querido opinar. “La directora nos dijo que ellos están en medio, que fue por sorteo, que nos tocó y que no fue un acto partidista porque lo decidió la Asamblea, pero ya estaba disuelta”. Efectivamente, fue una decisión del Gobierno de Ayuso que, según un portavoz de Educación, “mantiene, por supuesto, la concesión de la medalla” y el acto tal y como estaba previsto. “Queremos agradecer el trabajo, el esfuerzo y el ejemplo que los niños han dado y consideramos que es la mejor forma de hacerlo”, subraya el portavoz.

El vídeo ya se ha realizado “con la participación de aquellos niños cuyos padres lo autorizaron de forma voluntaria, incluidos algunos del Palacio Valdés”, del concertado Monjas Hijas de la Caridad y del de Educación Especial Fray Pedro Ponce de León. “La participación de los centros en esta iniciativa institucional ha sido totalmente voluntaria y son los colegios los que han realizado la selección de los alumnos a los que se ha grabado”, añade el portavoz, que desconoce cuántos rechazaron el ofrecimiento y cuántos aparecen finalmente. “Los permisos los firman sus padres, no las AMPA”, concluye.