La bandera arcoíris se muestra orgullosa en Náquera, localidad con un alcalde de Vox

Náquera se ha declarado orgullosa este miércoles de las banderas arcoíris. Centenares de personas -unas 600, según los organizadores-, convocadas por entidades como Lambda o Mirall, se han manifestado en defensa del movimiento LGTBI en este municipio valenciano, el único de la Comunidad Valenciana con un alcalde de Vox gracias a un pacto con el PP. Adultos y niños con carteles reivindicando “amar a quien tu quieras” y con las banderas española y multicolor pintadas en la cara, han protestado por las calles de este municipio de cerca de 8.000 habitantes en respuesta al veto del nuevo gobierno local a la bandera arcoíris en los edificios municipales. Han pedido al consistorio que recapacite y rompa “el pacto de la vergüenza”.

El acuerdo alcanzado por PP y Vox para gobernar este municipio incluyó dos puntos en los que señalan que “según el cumplimiento de la ley de banderas”, no colocará las enseñas o emblemas LGTBI “en balcones y fachadas de instalaciones municipales” y se sustituirá las concentraciones de No a la violencia machista por lemas más genéricos como No a la violencia o Condenamos toda violencia. El Ayuntamiento negó hace una semana que prohíba el uso de las señas de identidad del colectivo LGTBIQ+ en los distintos espacios públicos de la localidad, pero reiteró que seguirá el protocolo de banderas en los edificios municipales “tal y como se cumple en otras instituciones”. Este miércoles, Día Internacional del Orgullo, Náquera era uno de los Ayuntamientos que no ha colgado el emblema arcoíris de su fachada.

La marcha se ha nutrido de vecinos del municipio pero, sobre todo, de colectivos que se han desplazado en solidaridad desde Valencia y otros municipios del área metropolitana. Había pocas banderas multicolor colocadas en los balcones pero en algunos tramos, los vecinos han salido para aplaudir y animar al paso de los manifestantes, que han coreado Náquera, orgullosa o El orgullo es protesta, no solo una fiesta. Políticos del PSPV y de Compromís han arropado la manifestación con su presencia. La ministra de Ciencia y cabeza de lista del PSPV por Valencia a las elecciones generales del 23-J, Diana Morant, ha acudido a esta localidad situada a 30 kilómetros de la capital: “[Alberto Núñez] Feijóo ha conseguido en 20 días un retroceso de 20 años. No vamos a permitir ni un milímetro de retroceso en los derechos fundamentales de las personas”, ha denunciado Morant en alusión a sus pactos con Vox. También ha estado el candidato de Sumar-Compromís, Alberto Ibáñez.

La manifestación ha comenzado a las siete y media de la tarde —la ola de calor desaconsejaba adelantarla— y ha acabado a las puertas del Ayuntamiento, que estaba acordonada y custodiada por varios policías locales.

“Vamos a demostrar que Náquera es mucho más que su alcalde, que es una ciudad respetuosa con la diversidad sexual, porque no nos engañemos, la ley de banderas es una excusa, se agarran a tecnicismos para no decir abiertamente lo que, en el fondo, están deseando decir y es que somos enfermos, que nos tienen que curar”, ha defendido Fran Fernández, coordinador general de Lambda, asociación LGTBI decana en la comunidad autónoma. “Nadie plantea que se incumpla la ley de banderas porque si algo tiene el colectivo LGTBI es que somos demócratas, por tanto, no estamos pidiendo que se incumpla y alguien [Vox] que defiende tanto la bandera de España y el castellano debería saber la diferencia entre una bandera, un pendón, una pancarta o iluminar una fachada. Ampararse detrás de la ley de banderas para decir que no van a colgar ningún símbolo de nuestros colectivo, en el fondo significa que nos quieren de vuelta a los armarios. Me gustaría saber si cuando lleguen las fiestas de la Virgen no van a colgar tampoco ninguna pancarta religiosa, o cuando lleguen las Fallas no colgarán ninguna enseña festiva, porque tampoco son banderas oficiales. Su argumento hace aguas por todas partes”, ha remarcado el responsable de Lambda.

El colectivo LGTBI ha insistido en que su derechos y los de las mujeres víctimas de la violencia de género son cuestiones fundamentales y desde las administraciones se deben proteger y “eso no conculca ningún principio de neutralidad porque los derechos humanos no son ni de rojos, ni de azules ni de blancos o de verdes”, ha manifestado. El portavoz de Lambda ha pedido al gobierno local que recapacite y se rompa “ese pacto de la vergüenza”.

Muchos vecinos de la localidad han asistido como espectadores a la protesta. “Creo que se ha exagerado todo”, ha dicho una de las vecinas apostadas cerca del Ayuntamiento, mientras otras dos reclamaban libertad para vivir.