Amazon cerrará su centro logístico en Martorelles y trasladará a sus 800 empleados
La firma abrirá en marzo un nuevo centro en Zaragoza, que absorberá la actividad de Barcelona, y otro en Far d’Empordà (Girona), con un total de 2.500 trabajadores
El gigante del comercio electrónico Amazon ha decidido cerrar su centro logístico de Martorelles (Barcelona), en el que trabajan 800 personas, para trasladará su actividad a una nueva instalación que se abrirá hacia marzo en Zaragoza y que ocupará a un millar de empleados.
La firma ha asegurado este miércoles en un comunicado que se están manteniendo conversaciones con los representantes de los trabajadores para garantizar el empleo y trasladar a toda la plantilla de Martorelles a otros centros de España. Para ello cuenta con las grandes instalaciones de El Prat de Llobregat y de Castellbisbal, ambas en Barcelona), pero también otros centros más pequeños y más próximos a las poblaciones donde sirve. Según fuentes de la compañía no se contempla, al menos de momento, ningún plan de bajas voluntarias ni despidos, por lo que se prevé una recolocación total de los trabajadores.
Por otro lado, Amazon ha anunciado que este próximo abril abrirá el centro robotizado previsto en Far d’Empordà (Girona), que contará con unos 1.400 puestos de trabajo. Ese centro, totalmente robotizado como acostumbra a ser habitual en el gigante del comercio electrónico, se encargará de productos de pequeño formato. Sumará 165.000 metros cuadrados de superficie en diferentes plantas.
“Continuamos invirtiendo en nuestra red de centros en España para satisfacer la demanda de clientes”, ha señalado a través de un comunicado Fred Pattje, director de Cumplimiento con los Clientes de Amazon para España, Francia e Italia. Según la compañía, desde 2011 ha invertido más de 10.500 millones en España.
El gigante tecnológico y del comercio electrónico fundado por Jeff Bezos empezó a despedir en noviembre pasado a miles de empleados, pero el ajuste será mayor de lo esperado y alcanzará los 18.000 empleos, según anunció la semana pasada la compañía. Con ello, la cifra supera los 11.000 despidos anunciados por Meta el pasado año y se convierte en el mayor recorte llevado a cabo por una de las grandes tecnológicas.
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