_
_
_
_
_

Llega a juicio el caso del primer inquilino que se niega a abandonar la Casa Orsola de Barcelona

La finca del Eixample, a pie de la Superilla, fue comprada hace un año y la propiedad no renueva los contratos que vencen

Juicio Casa Orsola
Protesta de los vecinos de Casa Orsola, en Barcelona, el pasado mes de noviembre.Albert Garcia

Una veintena de personas se han concentrado ante la Ciutat de la Justicia de Barcelona en protesta por el juicio contra un inquilino de Casa Orsola, edificio del Eixample barcelonés comprado por un fondo de inversión en 2021, que se ha negado a abandonar el piso tras acabar su contrato de alquiler, instado por la nueva propiedad.

Diversas entidades en defensa de la vivienda han convocado este lunes la concentración ante los juzgados en apoyo a Josep Torrent, el primer vecino de ese inmueble al que se juzga por no abandonar su vivienda tras finalizar el contrato de alquiler hace seis meses, y en contra de la intención del fondo de construir, al parecer, pisos de lujo en el edificio.

Torrent vive en Casa Orsola desde hace veinte años y su contrato de alquiler acabó a finales de abril del pasado 2022. A pesar de que la nueva propiedad le conminó a dejar la vivienda cuando finalizó su contrato, Torrent ha continuado pagando el alquiler, como el resto de vecinos que se encuentran en su misma situación. Hace más de un año que los vecinos reclaman a la nueva propiedad, un fondo de inversiones español, que se avenga a una negociación colectiva, pero no se ha llegado a un acuerdo.

Por el contrario, la nueva propiedad ha instado la demanda contra los vecinos que tienen el contrato finalizado y hoy se ve ante el juez el caso de este primer vecino de la finca. Adquirida por la nueva propiedad en octubre de 2021, los inquilinos recibieron un burofax en el que se les informaba de que no se les renovarían los contratos de alquiler.

Los vecinos de la finca, con el apoyo de entidades como el Sindicato de Inquilinas y la Red de Vivienda de l’Esquerra de l’Eixample, han intentado que la propiedad reconsiderara la decisión de no renovarles los contratos, sin éxito. Incluso la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, envió una carta a los propietarios en defensa de las familias que viven en Casa Orsola y ofreciendo la mediación del consistorio, que no obtuvo respuesta. Albert Freixes, de la Red de Vivienda de l’Esquerra de l’Eixample, ha afirmado que la lucha de los vecinos de Casa Orsola “es la lucha de todo un país” y que el objetivo es desahuciar a todos para poder hacer pisos de lujo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_