Abonos de tren gratuitos: así afectará la medida a Cataluña

El vicepresidente de la Generalitat de Cataluña y máximo responsable de la consejería de Territorio y Políticas Digitales, Jordi Puigneró, ha reaccionado con disgusto al anuncio del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre la gratuidad de los billetes de Rodalies de Renfe a partir del próximo septiembre. Puigneró ha manifestado este martes que la medida anunciada por el presidente del Gobierno este martes durante el Debate del Estado de la Nación “pone en riesgo las finanzas del transporte público” y constituye una reacción “irresponsable”, pese a ser presentada como un cortafuegos frente a los temidos efectos que la inflación pueda causar en la economía. “Es populista”, ha dicho Puigneró, que ha descartado que la gratuidad total vaya a ser aplicable a todos los usuarios de los servicios de las líneas de Rodalies (Cercanias). El compromiso hecho público por el jefe del Ejecutivo se limita, dice, “a aquellos billetes que son propios de Renfe”.

El matiz sirve para excluir de la gratuidad a los billetes integrados que combinan servicios de Renfe y de la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM), como es el caso del Metro, bus y Ferrocarrils de la Generalitat (FGC). En este supuesto, donde se incluyen las populares tarjetas multiviaje T-casual, T-usual, T-grup, T-familiar o T-dia, el descuento será parcial. “Vamos a mantener lo que ya habíamos acordado, una bonificación del 50%”, ha ratificado Puigneró. El volumen de usuarios de los trenes del servicio de Rodalies que viaja con alguno de los títulos de lo que se conoce como sistema tarifario integrado representa el 70% del total del pasaje, según apuntan fuentes ferroviarias.

“Los usuarios de Rodalies Renfe lo que piden es que el servicio funcione, no que sea gratis”, valoró el vicepresidente del Govern en una comparecencia convocada expresamente para responder a las medidas proclamadas por Pedro Sánchez en el Congreso. “El gratis total de hoy son los recortes del mañana”, ha advertido Puigneró.

Las críticas de Puigneró al discurso de Sánchez son otro capítulo del encontronazo entre Generalitat y Gobierno acerca de la gestión del transporte público en Cataluña. El servicio de Rodalies acumula incidencias y retrasos constantes y se ha convertido en una arma arrojadiza del Govern para denunciar la desatención, a su juicio, de la Administración del Estado con Cataluña. El Ministerio de Transportes replica que la Generalitat es competente en horarios, frecuencia de paso, tarifas e información a los usuarios. Desde la consejería de Territorio se alega tener las manos atadas para poder garantizar un buen servicio y se reclama insistentemente el traspaso total de las competencias.

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