El Govern destina 36,6 millones a la nueva cárcel de la Zona Franca de Barcelona

La Generalitat destinará 36,6 millones de euros para construir una nueva cárcel, de régimen abierto, en la Zona Franca de Barcelona. La instalación acogerá a presos de otros centros de la ciudad que están en mal estado de conservación: Trinitat Vella, con internos en tercer grado (los que solo acuden a la cárcel a dormir) y la unidad abierta de hombres de Wad-Ras, que funciona en la cárcel de mujeres del mismo nombre.

Justicia, que acaba de abrir el proceso de licitación, prevé que el nuevo centro entre en funcionamiento en 2025. Las instalaciones ocuparán un solar de 6.500 metros cuadrados y tendrán 800 plazas, lo que supera las 603 que suman entre Trinitat Vella y Wad-Ras. Las plazas extras se destinarán al cumplimiento de penas en contacto progresivo con la sociedad, que ofrecen más garantías de reinserción.

La tasa de reincidencia es menor cuando los presos llegan a la libertad definitiva desde el régimen abierto (18,1%) que cuando lo hacen directamente desde el régimen ordinario (34%). El edificio de Zona Franca permitirá liberar el espacio que ocupa la antigua prisión de la Trinitat, donde está prevista la construcción de viviendas, zonas verdes y otros equipamientos.

El calendario de cierres de las cárceles de Barcelona ha sufrido diversos retrasos. El nuevo emplazamiento de la Zona Franca ha necesitado de un acuerdo con el Ayuntamiento de Barcelona para la cesión de los solares, que tienen que ser descontaminados. La Generalitat costeará la construcción de la nueva cárcel (es su competencia) y venderá la parcela de la cárcel de la Trinitat para el desarrollo urbanístico en el distrito de Sant Andreu.