La T-Mobilitat llega a 18.000 viajeros de Barcelona a través de TMB

La T-Mobilitat ha llegado al menos a 18.000 viajeros cu ando se cumplen más de tres semanas del cierre de la web oficial de la tarjeta —no llegó a estar abierta ni 48 horas— por un agujero de seguridad que comprometió datos personales de 2.000 personas. Estos títulos de transporte se han repartido a través del portal de TMB (JoTMBé), que ya tenía preparada su infraestructura digital para vender tarjetas en el nuevo soporte, en su condición de distribuidora oficial. La Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM), responsable del despliegue de la T-Mobilitat, rechaza dar cifras sobre la cantidad de tarjetas que ha vendido en su punto de atención presencial, el único canal que ahora mismo tiene abierto.

Un error de protección de datos hizo fracasar la puesta a disposición del público general de la T-Mobilitat a principios de mes. Fue un capítulo más en un proyecto de despropósitos, marcado por más de seis años de retrasos y un presupuesto público de 115 millones que dobla el establecido inicialmente. Hasta entonces 4.000 personas habían participado en las primeras fases de prueba de la tarjeta, cantidad que, según afirmó el responsable de la T-Mobilitat en ATM, Ramon Bacardí en una entrevista con EL PAÍS, ascendía a 9.000 el pasado 8 de octubre. El número actual de ATM, sumado al de TMB, daría el total de usuarios de la tarjeta. No obstante, la autoridad del transporte rechaza facilitar la información “hasta que no se logre la normalidad de todos los canales”. Tampoco quiere hablar de cuándo se volverá a activar la web. “Estamos trabajando en ello. En el momento en que esté lista para reabrir os informaremos de ello”, declaran fuentes de ATM.

La gestora de bus y metro es la única que ahora vende la tarjeta por internet

TMB también tiene una app (TMBApp) en fase de pruebas que incluye la validación de la tarjeta desde móviles Android con tecnología NFC. En ese sentido, la app de ATM (T-Mobilitat) sigue activa para los usuarios registrados (Android y iOS). Sin embargo, tal y como ha reconocido ATM en su canal de Twitter, el cierre de la web afecta a algunas de sus funcionalidades. “Temporalmente no es posible iniciar sesión. Lo que sí puedes hacer con la aplicación es leer y recargar la tarjeta física”, advertía una community manager de T-Mobilitat este jueves por la mañana a una usuaria que mandaba un pantallazo de un error informático en su teléfono móvil.

La autoridad el transporte rechaza poner fecha a la reapertura del portal

ATM ha recordado en Twitter esta semana que la T-Mobilitat sigue en pruebas en 36 municipios del área metropolitana. También ha difundido algunas nuevas funcionalidades: como el hecho de que, los viajeros de más de 25 años, tendrán asignado un perfil de la T-Jove de forma automática. El perfil informativo de la T-Mobilitat también recuerda que los que se dieron de alta en la web, pero no tienen la tarjeta, la podrán volver a pedir cuando reabran la web, o en el centro T-Mobilitat de l’Hospitalet de Llobregat, con cita previa. La alternativa digital es acudir a la web de TMB.

En el pleno del Parlament

Los desaciertos de la T-Mobilitat llegarán al Parlament en las próximas semanas. La portavoz del PSC-Units, Alícia Romero, anunció este martes que llevará al pleno una moción sobre el proyecto, al entender que representa “uno de los fracasos del Govern”, por lo que los socialistas quieren proponer medidas para dar respuesta a las necesidades de los ciudadanos. El Síndic de Greuges, por su parte, investiga los problemas de implantación de la T-Mobilitat desde el fallo de seguridad, que también analiza la Agencia de Ciberseguridad de Cataluña.

Tras opininar Ramon Bacardí que la exposición de datos de usuarios “fue un error muy tonto”, ATM se ha mantenido en silencio sobre la evolución de la prueba piloto del nuevo sistema de pago. También evita informar sobre la evolución de la reparación de la web la adjudicataria SocMobilitat, unión empresarial controlada por CaixaBank, Indra, Fujitsu y Moventia que maneja la mayor parte de la adjudicación pública al proyecto, 94,5 millones de euros.