Las turbias cuentas de la Abadía de Montserrat

La Sindicatura de Cuentas de Cataluña ha publicado este miércoles un informe que concluye que la Generaitat, a través del Patronato de la Montaña de Montserrat, otorgó en 2017 dos millones de euros en subvenciones irregulares a la Abadía de Montserrat. El órgano fiscalizador relata que “el procedimiento de concesión no se ajustó a la normativa en materia de subvenciones”, pues estas ayudas “no han quedado correctamente justificadas y se incumplió la normativa en materia de contratación pública”.

El Patronato de la Montaña de Montserrat es una entidad autónoma adscrita a la presidencia de la Generalitat y encargada de la gestión del Parque Natural de la Montaña de Montserrat en el que se encuentra el popular monasterio. La zona fue visitada en 2017 por más de 2,7 millones de personas. El presidente de la Generalitat lo es también del patronato. En aquella época era president Carles Puigdemont, que permanece huido en Bélgica desde noviembre de 2017.

Las irregularidades detectadas corresponden a una subvención de un millón y medio de euros “por la prestación de servicios públicos en el interior de la zona urbana propiedad del Monasterio” y la otra, de 500.000 euros, concedida para rehabilitar la estructura de la pasarela de acceso al monasterio.

En el primer caso, los servicios fueron prestados por Agrícola Regional, SA (LARSA), sociedad participada en un 98% por la Abadía. La ley impide subcontratar una actividad subvencionada a no ser que esté previsto explícitamente en la normativa reguladora de la subvención, lo que no sucede en este caso, asegura el informe de la Sindicatura.

El beneficiario, en este caso la abadía, debería haber solicitado un mínimo de tres ofertas diferentes, dada la cuantía de los trabajos, cosa que no sucedió. Tampoco existe un contrato de prestación de servicio entre las partes.

El informe de la Sindicatura, que es un organismo dependiente del Parlament, explica que LARSA aportó justificantes de gastos por 1,6 millones de euros, pero “no hay evidencia de los pagos ni información sobre fuentes adicionales de financiación”, por lo que se concluye que no se ha demostrado el coste soportado por esta empresa. Tampoco se presentó memoria del cumplimiento de la finalidad de la subvención.

En cuanto a la subvención para reformar la pasarela también se concedió de forma directa, sin seguir el procedimiento establecido. “Una entidad privada como es la Abadía de Montserrat no puede contratar obras en nombre de un organismo autónomo administrativo como es el Patronato de la Montaña de Montserrat y al margen de la normativa sobre contratación pública”, añaden.

Las obras debió contratarlas y ejecutarlas el Patronato, y el importe debió incorporarse al capítulo de inversiones. Durante la redacción del informe, la Abadía presentó a la Sindicatura fotocopias no compulsadas de 503.905 euros, pero se concluye que en este caso tampoco “hay evidencia de los pagos ni información sobre las fuentes adicionales de financiación ni del coste total de la rehabilitación”. El informe describe una mezcla de facturas sobre las certificaciones de obras y facturas de dirección, de manera que no se puede saber qué parte corresponde a cada concepto.