Sorpresa y malestar ante la propuesta en Andalucía de enseñar música cofrade y visitar capillas antes de Semana Santa
Profesores y familias cuestionan la oportunidad de la circular remitida el Gobierno andaluz por atentar contra la laicidad de la enseñanza pública y promover actividades que ya se están desarrollando
La Junta de Andalucía ha instado a todos los centros educativos públicos a “celebrar actividades relacionadas con la música de la Semana Santa” en la semana previa a estas vacaciones escolares. Bajo esta premisa, la Consejería de Desarrollo Educativo invita a través de una circular a “programar para el alumnado actividades vinculadas” con este género musical y, como ejemplo, incluye “conciertos en el centro organizados por el profesorado de música; asistencia a ensayos de bandas profesionales; exposiciones didácticas de instrumental; estudio de biografías de compositores”, pero también “visitas a capillas” o “la recreación de un pequeño museo cofrade”. También anima a colegios e institutos a que incorporen en la planificación de actividades extraescolares y complementarias el “desarrollo curricular” de contenidos vinculados a la música cofrade y procesional.
La instrucción ha causado malestar y también cierta sorpresa entre la comunidad educativa que considera que estas sugerencias esconden la intención de “imponer un determinado posicionamiento ideológico” por parte del Gobierno del popular Juan Manuel Moreno Bonilla, que no es acorde con la aconfesionalidad recogida en la Constitución y que condiciona la autonomía pedagógica de los centros educativos. Cuestionan, además, que apenas hay margen para incorporar esas actividades en los centros porque la instrucción de la Junta llega solo una semana antes del período que se plantea para el desarrollo de los contenidos que propone y en plena corrección de los exámenes y evaluaciones del segundo trimestre.
“Somos la única comunidad cuyo Gobierno ha remitido una circular referida a actividades relacionadas con la Semana Santa, en este caso la música”, señala Jorge Delgado, presidente de la Federación de directivas y directivos de centros públicos de educación infantil y primaria (Fedeip), antiguo responsable de la Asociación de Directoras y Directores de centros de Infantil y Primaria de Andalucía y director del CEIP Blas Infante de Écija (Sevilla). Delgado llama la atención sobre el hecho de que en otros territorios también con arraigadas tradiciones cofrades y con Ejecutivos de PP, como Castilla y León o Murcia, no se han distribuido cartas similares. “Parece que viene a reforzar al tendencia de un partido hacia esta tradición”, indica Delgado.
El sindicato educativo Ustea ha sido el más beligerante con la instrucción de la Junta recordando que en la comunidad el 29,2% de las familias de Primaria, el 38,8% de las de Secundaria y el 37,7% de Bachillerato optan por que sus hijas e hijos no estudien religión católica y de ellas, la enorme mayoría, eligen no cursar ninguna religión. “Un tercio del alumnado andaluz de la escuela pública elige no estudiar religión, pero la Consejería ha decidido promover que las actividades de los colegios giren en torno a un ritual católico”, indican en un comunicado en el que argumentan que esta medida “choca con la aconfesionalidad establecida por la Constitución” y recuerda que coincide con la semana en la que el alumnado musulmán comienza el Ramadán.
Las asociaciones de Madres y Padres de Alumnos también cuestionan la oportunidad de la circular y recuerda que la escuela pública “debería ser laica y promover la convivencia entre culturas”. “La sociedad andaluza es más laica de lo que el Gobierno pretende”, indica la Confederación Andaluza de AMPA por la Educación Pública (Codapa).
“Con la percha de la música profesional, se normaliza y oficializa la ocupación en los centros educativos públicos con prácticas propias de la religión católica”, añade Ustea, que cita la representación de procesiones de Semana Santa que organizan muchos colegios y que también cuestionan desde Codapa. Esta actividad, en la que los alumnos se visten de nazarenos y los niños van disfrazados de costaleros o capataces y las niñas van vestidas de mantilla, es objeto de una polémica recurrente en estas fechas. La circular de la Junta no alude a este tipo de actividad. “Han querido resaltar la vertiente de costumbre y tradición de la música cofrade y yo pensaba que precisamente venía a regular esas salidas procesionales que hacemos en los centros y que sí generan controversia”, explica Delgado.
Desde la Consejería de Desarrollo Educativo se insiste en que todas las propuestas de la circular están relacionadas únicamente con la música de Semana Santa. Explican que cuando se alude a las visitas a las capillas -también unas salidas habituales en los colegios para que los alumnos puedan ver los pasos montados en las Iglesias- precisan que solo podrían realizarse porque, por ejemplo, en ellas haya instrumentos musicales.
“La música de Semana Santa y procesional constituye uno de los referentes creativos más representantes del patrimonio musical de Andalucía”, se indica en la circular. La consejería se apoya en el Real Decreto 384/2017, de 8 de abril, que declara la Semana Santa como manifestación representativa del patrimonio cultural inmaterial. Y precisamente como parte de ese acervo cultural -hay muchos niños que se inician en la música formando parte de las agrupaciones infantiles de las bandas de música andaluzas- muchos centros educativos imparten materias relacionadas con la cultura, las costumbres y las tradiciones cofrades. Por eso a los educadores les sorprende que se incluya ahora en una circular.
“Mi profesora de Música está viendo la percusión con los chavales de 6º de Infantil y como aquí en Écija la Semana Santa es muy importante, les enseña la asignatura con marchas, pero ya estaba programado, no tiene nadie que venir a decírmelo”, indica Delgado. Antes que en Écija, el director estuvo al cargo de otro centro en Marinaleda (Sevilla), donde esa cultura no existe y por eso también defiende la autonomía docente de los centros para adaptar el currículo a sus particularidades. “Si allí las visiones sobre las propias tradiciones y costumbres son otras, habría que trasladarlo desde una visión distinta”, indica.
Sin previsión ni tiempo
La Junta propone que estas nuevas actividades vinculadas con la música cofrade las impartan los profesores de Música. “Estamos perfectamente capacitados y de hecho la trabajamos cuando abordamos la cultura andaluza, junto con el Flamenco, pero esto supone una mayor carga de trabajo para un colectivo al que se nos está tratando muy mal, sobre todo en Primaria donde apenas tenemos tiempo para desarrollar el currículo”, indica Elisa Vegazo, vicepresidenta de la Asociación de Profesores de Música de Andalucía. “Parece que lo hagan para colgarse medallas, cuando a nosotros nos resta valor y todo a 10 días del Domingo de Ramos, la circular llega tarde y mal”, añade.
Virginia Rodríguez, presidenta de la Asociación de Directoras y Directores de Institutos de Andalucía (Adian) también llama la atención sobre la premura de la carta de la Junta. “Todos asumimos que la Semana Santa y su música forman parte de la cultura andaluza, pero para poder poner en práctica lo que la administración nos envía hay que dedicarle tiempo. No hay ninguna previsión”, censura. Rodríguez cuestiona que se inste a incluir actividades relacionadas con la música de la Semana Santa en el desarrollo curricular como actividad complementaria o extraescolar. “Esto debería plantearse en el arranque del curso escolar porque hacerlo sin previsión nos impide compatibilizarlas con el desarrollo de nuestro propio currículo que ya nos cuesta cumplir”, abunda.
La circular de la consejería viene acompañada de material para descargar y trabajar en clase, pero de nuevo el momento se cuestiona. “Nos pilla corrigiendo los exámenes y estamos con evaluaciones y ya hemos planificado las actividades para adaptarnos a la nueva carga de trabajo. Que esto nos llegue a final del trimestre nos dificulta la organización de actividades”, indica Rodríguez.
También insisten en que ninguna de estas iniciativas son obligatorias. Todas las propuestas de actividades vienen precedidas de un “podrán” y también se precisa que tendrán carácter voluntario para todos los alumnos y alumnas y en ningún caso formarán parte del proceso de evaluación del alumnado para la superación de las distintas áreas, materias, ámbitos o módulos que integran los currículos”. En esa falta de concreción se apoya Delgado para cuestionar la necesidad de la instrucción. “Es humo, ha quedado un texto genérico, que lo deja todo abierto y que recoge propuestas que ya tienen cabida en Educación Artística”, señala el director. “Ocurrencia”, la definen desde Codapa, que cuestiona que la Junta haya introducido un debate que “no suscita interés” en la escuela pública para “distraer” de asuntos cruciales como el cierre de aulas y las ratios ilegales.
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