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Armengol usará catalán, euskera y gallego en el juramento de Leonor de Borbón

El Congreso invitará a la ceremonia a representantes de la sociedad civil para que el hemiciclo refleje la España real

La presidenta del Congreso, Francina Armengol, en una rueda de prensa en el Congreso en agosto.
La presidenta del Congreso, Francina Armengol, en una rueda de prensa en el Congreso en agosto.Alejandro Martínez Vélez (Europa Press)

La presidenta del Congreso, Francina Armengol, pronunciará unas palabras en catalán, euskera y gallego durante el juramento de la Constitución de la princesa de Asturias, Leonor de Borbón, este martes, según fuentes parlamentarias. El discurso de Armengol es el único previsto en la ceremonia, ya que será ella misma quien lea el acuerdo del Consejo de Ministros del pasado 10 de octubre por el que se solicitaba la celebración de esta sesión conjunta del Congreso y el Senado, y no el letrado mayor de las Cortes Generales, como sucedió en el juramento del entonces príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, el 30 de enero de 1986.

Con la pronunciación de unas frases en las lenguas cooficiales —la princesa de Asturias habla catalán con fluidez, como ha demostrado, y también euskera y gallego—, la presidenta del Congreso dará carta de naturaleza en este acto solemne a la normalización del empleo de las lenguas españolas diferentes al castellano en las actividades de la Cámara baja, que ha sido uno de sus compromisos en la legislatura que acaba de arrancar. Al mismo tiempo, permitirá ilustrar la diversidad cultural de España, cuya imagen plural se ha visto mermada en este acto por la ausencia de los nacionalismos periféricos.

A la ya prevista ausencia de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Junts per Catalunya (JxCat), Bildu y Bloque Nacionalista Galego (BNG) se ha sumado la del PNV, tras un intenso debate interno. De su lado, el socio minoritario del Gobierno se ha divido: Sumar ha anunciado su intención de enviar una “representación institucional”, encabezada por la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz; pero ni los diputados de Podemos ni sus dos ministras, Ione Belarra e Irene Montero, acudirán. Y tampoco estará presente el titular de Consumo y líder de IU, Alberto Garzón.

Con estas ausencias, la representación de las Cortes Generales que asistirá al juramento de la princesa de Asturias estará escorada hacia la derecha: los alrededor de 325 diputados y senadores del PP, Vox, Coalición Canaria o UPN, serán un centenar más que los parlamentarios de la izquierda.

Para que en el hemiciclo se refleje la España real, la Presidencia del Congreso ha invitado a la sesión a representantes de la sociedad civil; entre los que habrá jóvenes más próximos a la generación de Leonor de Borbón, que este martes cumple 18 años. Se sumarán a los invitados institucionales, como los presidentes de las comunidades autónomas —salvo el lehendakari vasco, Iñigo Urkullu, y el president de la Generalitat, Pere Aragonès, que han declinado la invitación—, los expresidentes del Gobierno, del Congreso y del Senado.

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La condición de mujer de la princesa de Asturias será uno de los aspectos que, según las fuentes consultadas, destacará Armengol en su discurso. El hecho de que una mujer pueda ser jefa del Estado por primera vez en más de 120 años sintoniza con el empoderamiento de las mujeres en la sociedad española y su necesario acceso a puestos de responsabilidad. Armengol también aprovechará para hacer una defensa del sistema democrático y constitucional y del diálogo y la concordia como fórmulas de entendimiento, en un clima de creciente polarización.

Lo que no cambiará será la fórmula del juramento, que viene prevista en el artículo 61.2 de la Constitución: “Juro desempeñar fielmente mis funciones, guardar y hacer guardar la Constitución y las leyes, respetar los derechos de los ciudadanos y de las comunidades autónomas, con fidelidad al Rey”. A los altos cargos se les da la oportunidad de elegir si quieren jurar o prometer, pero para la heredera solo está previsto el juramento, en lo que algunos juristas ven una vulneración del principio de no confesionalidad del Estado. Francesc Carreras, catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad Autónoma de Barcelona, considera, sin embargo, que el juramento no tiene por qué tener una connotación religiosa, ya que se puede jurar por la propia conciencia o el honor.

El juramento de la Constitución por parte de Leonor de Borbón tiene una dimensión jurídica, además de simbólica, según subraya el acuerdo del Consejo de Ministros: significa que acepta su condición de heredera de la Corona y está dispuesta a asumir las responsabilidades de jefa del Estado en el momento en que falte Felipe VI.

Tras jurar sobre el mismo ejemplar de la Constitución en el que lo hizo su padre, los presidentes del Congreso y el Senado impondrán a la princesa de Asturias las medallas de sus respectivas cámaras y, a continuación, firmará en el libro de honor del Congreso, que inaugurará su segunda edición. ´

En el Palacio Real, el Rey impondrá a Leonor de Borbón el collar de Carlos III. Será ese el momento en que pronuncien un discurso tanto la princesa como el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez. Felipe VI intervendrá en el posterior almuerzo ofrecido a los titulares de las altas instituciones del Estado. En el trayecto desde La Zarzuela hasta el Congreso, y luego al Palacio Real, los Reyes y sus hijas se desplazarán en dos vehículos históricos de Patrimonio Nacional, escoltados por la Guardia Real.

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