El Defensor del Pueblo investigará de oficio el naufragio de la zódiac en la que murieron dos personas y desaparecieron otras 34
La institución reclama datos para saber por qué España no acudió al rescate de la embarcación, cuya operación se demoró unas 12 horas y acabó en tragedia. Una de las fallecidas es una niña de cinco años
El Defensor del Pueblo ha anunciado este viernes que ha iniciado una actuación de oficio para determinar lo sucedido en torno al naufragio de la zódiac que se hundió el miércoles a 148 kilómetros de Arguineguín (suroeste de Gran Canaria). La tragedia se saldó con al menos dos personas muertas —una de ellas, una niña de unos cinco años— y 34 desaparecidos, después de que la embarcación esperase durante casi 12 horas a que los equipos de rescate acudiesen en su auxilio.
La institución que dirige Ángel Gabilondo asegura que la actuación se lleva a cabo ante el Centro de Coordinación Regional de Canarias de la Autoridad de Coordinación Frente a la Inmigración Irregular, así como ante la Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima (Sasemar).
Salvamento Marítimo señaló el jueves a EL PAÍS que en la zona en la que se encontraba la embarcación, que desde su avistamiento estuvo unas 12 horas a la espera de ser atendida, podían intervenir tanto los servicios de rescate españoles como los marroquíes. Las fuentes sostienen que “se trata de una zona compartida a este respecto, de acuerdo con las zonas SAR [del inglés search and rescue, búsqueda y rescate] de la Organización Marítima Internacional”.
Una grabación de los servicios de seguridad a la que tuvo acceso la Cadena SER demuestra, sin embargo, que hubo dudas entre el centro coordinador de Salvamento de Las Palmas y el piloto del avión de búsqueda sobre si las aguas en las que estaba la lancha eran marroquíes o españolas. El piloto insistió en que se encontraban en las aguas de la zona de búsqueda y rescate que corresponde a España. “Esa posición está dentro la zona SAR nuestra”, se oye afirmar al piloto, según los audios.
Según Salvamento Marítimo, en este caso, al encontrarse la neumática más cerca de la costa africana —a 74 kilómetros frente a Blaya, cerca de El Aaiún, y al doble de distancia de Gran Canaria—, “Marruecos asumió expresamente la coordinación y movilizó los medios y buques que decidió en cada momento”. La portavoz asegura que este procedimiento es aplicado habitualmente por Salvamento Marítimo en colaboración con otros Estados.
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha defendido este viernes el trabajo de Salvamento Marítimo, y ha asegurado que “se actuó correctamente”, que el barco de salvamento marroquí era el que estaba más cerca del lugar de los hechos y que previamente un avión español había confirmado que la barca estaba en buenas condiciones.
En igual sentido se ha expresado el ministro de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, quien ha afirmado que el Gobierno trabaja para tener toda la información posible. Al ser preguntado sobre la información que tiene el Ejecutivo de este asunto, Bolaños se ha remitido a las palabras de la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, que este viernes indicó que no podía dar “información detallada” al respecto.
El portavoz de la CGT en Salvamento Marítimo, Ismael Furio, admite a EL PAÍS que existen ciertas dudas de a cuál de los dos países corresponde el rescate. “Nosotros tenemos claro que esa zona SAR es responsabilidad española. Pero, al parecer, la orden de arriba pasa por que son aguas compartidas con Marruecos, y por eso, el mando único se pone en contacto con ellos”. Para Furio, en todo caso, la clave en esta tragedia reside en el lado marroquí. “El problema ha estado aquí en que la patrullera ha tardado casi 12 horas en acudir. Es un servicio que funciona mal, que demora el rescate y que cuenta con embarcaciones poco operativas. Salvamento Marítimo no negó el auxilio. Lo niego absolutamente”.
“Es zona SAR española desde hace muchos años, sin ninguna duda”, sentencia por su parte Jaime Rodrigo de Larrucea, profesor de Derecho Marítimo de la Universidad Politécnica de Catalunya. “Desde el punto de vista jurídico, España podría perfectamente haber llevado a cabo el rescate. Otra cosa es que se decida, no se sabe por qué extraña razón, ceder la operativa”. El jurista coincide, no obstante, en que en este caso “ha habido una lamentable negligencia grave de Marruecos”.
“Si entras en la página de Salvamento se puede ver que en la zona SAR alrededor de Canarias es responsabilidad de España», señala el asesor del Gobierno de Canarias en materia migratoria y candidato al Senado por Nueva Canarias, Txema Santana, “pero desde hace un tiempo vemos que en algunos puntos, España espera con cada SOS a que Marruecos reaccione, y esto debe de responder a un acuerdo expreso que debe estar en algún lugar por escrito, pero que no ha trascendido”.
Avistamiento
La ONG Caminando Fronteras informó a las autoridades españolas de la existencia de una embarcación neumática con unas 60 personas a bordo. El avión Sasemar 101 avistó la embarcación a las 19.53 del martes y contactó con el centro operativo de Las Palmas, el cual, a su vez, se puso en comunicación con el MCC Rabat, la coordinación de emergencias marroquí, según explicaron el miércoles fuentes de Salvamento Marítimo. El organismo español también solicitó a varios buques mercantes en la zona que informaran si divisaban la embarcación neumática. Acudió a la llamada el Navios Azure, un carguero de 260 metros que se dirigía a Algeciras.
Marruecos, sin embargo, no acudió al rescate hasta las 6.20 del miércoles, lo que significa que la endeble lancha estuvo casi 12 horas a la espera desde que fue avistada, solo custodiada por el carguero, al que se indicó que no interviniera. Entre medias, el buque Guardamar Calliope, de Salvamento Marítimo, intervino a las 20.30 en otro operativo de rescate de 63 personas que navegaban en una lancha neumática en dirección a Canarias. Durante su regreso, la embarcación de auxilio llegó a estar a medio centenar de kilómetros de la neumática siniestrada. La embarcación de Salvamento Marítimo, sin embargo, prosiguió su viaje hacia su base en Arguineguín. “Dichas personas”, explica al respecto el organismo, dependiente del Ministerio de Transportes, “necesitaban ser asistidas en tierra lo antes posible”.
Ismael Furio justifica que la Calliope regresase a puerto. “Teníamos una unidad operativa que regresaba cargada a puerto, y no se puede llevar a cabo otro rescate si tienes a 40 personas tumbadas a bordo”, razona. “Si no hay más remedio, se hace, pero habría sido un caos”, sentencia. “La controladora hizo lo correcto, que es ceder la operación”.
Los servicios de emergencia de España, en todo caso, aseguraron a este periódico que volvieron a ofrecer su ayuda a Marruecos al mediodía del miércoles, y que fue entonces cuando Rabat les reclamó apoyo aéreo, 15 horas y media después de haber sido avistada la embarcación por el avión español. El helicóptero Helimer 201 llegó a la zona a las 11.36 “para iniciar la búsqueda”. Con trágicos resultados. A las 12.34 localizó y recuperó el cuerpo de una niña, “sin encontrar rastro de más supervivientes”.
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