La frustración de Rafael Mozo, presidente del Poder Judicial, tras suspender el PP las negociaciones: “Estoy muy indignado, la Constitución hay que cumplirla”

El presidente del Consejo General del Poder Judicial, Rafael Mozo, se ha mostrado “muy indignado” tras conocer que el PP suspendía las negociaciones para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Mozo, que ha sustituido a Carlos Lesmes tras su dimisión hace dos semanas y media al frente del órgano de gobierno de los jueces, lo ha asegurado con rotundidad en una entrevista en la Cadena SER: “Mi preocupación se ha agudizado”. La noticia de la paralización unilateral de las conversaciones anunciada por los populares a última hora de la tarde de este jueves le ha sorprendido porque esperaba que la situación se resolviese en positivo y en breve. Mozo ha asegurado que este viernes, antes de conocerse la ruptura del PP con el Gobierno, entre los miembros del CGPJ, reunidos en pleno, cundía un ambiente de alegría porque entendían que la parálisis de la renovación tocaba ya a su fin: “Y nos hemos encontrado con esta paralización”, ha señalado.

Para Mozo, esta ruptura, cuya noticia ha recibido “con mucha extrañeza”, supone “una crisis institucional profunda” que “afecta a órganos fundamentales”, es “muy grave” y “agudiza la crisis institucional en el funcionamiento de la justicia”.

“Deben reanudar las negociaciones”, ha instado Mozo enseguida; “por encima de todo está el cumplimiento de la Constitución”, ha recalcado, para lamentar la paralización que el bloqueo, que perdura desde hace más de cuatro años, dificulta la operativa judicial. “Ahora, por mucho que hagamos nosotros, tenemos limitadas nuestras competencias”. “No es normal ya que estemos aquí”, se ha quejado, en relación con el bloqueo. “Ha habido ocasiones en que han podido renovar ya”, ha asegurado sobre la negociación entre los partidos, aunque no ha querido valorar si la suspensión se debía a una excusa.

Preguntado por si se plantea adoptar alguna medida por el frenazo en las negociaciones, Mozo ha asegurado: “Todavía no nos ha dado tiempo a reaccionar, me he enterado hace media hora”. Luego, ha descrito la sesión del pleno del jueves, en el que se había fijado la fecha del día 10 de noviembre “como muy tarde” para aprobar informes pendientes y resolver recursos, porque daban por hecho que iba a haber un acuerdo inminente. Ahora, “habrá que cambiar los planteamientos de trabajo a la vista por los tiempos”, ha zanjado. “Si las negociaciones son a medio o largo plazo habrá que valorar otros planteamientos”, pero ha descartado por el momento una dimisión porque hay pendiente por conocer “la variable” de si las conversaciones se reanudan en breve o no.