La compañía del avión de Palma asegura que dos de los fugados fueron apresados por agentes y devueltos a la aeronave

Dos de las personas que huyeron a la carrera de un avión que aterrizó por una supuesta emergencia médica el pasado viernes en el aeropuerto de Palma fueron alcanzadas por la Guardia Civil dentro del perímetro del aeropuerto y fueron introducidas de nuevo en la aeronave, según el informe de la compañía aérea. Pasadas las dos de la madrugada, el avión emprendió el vuelo de nuevo, pero no hacia Estambul, como inicialmente estaba previsto, sino de vuelta a Marruecos, según el citado informe de la aerolínea que operaba el vuelo, Air Arabia, y que ya forma parte del sumario del caso, confirman fuentes judiciales. Fuentes del Ministerio del Interior negaron tener ninguna información al respecto: “De esos aspectos operativos no sabemos nada”, señalaron, desde el departamento de Fernando Grande-Marlaska, responsable de los retornos de extranjeros que entran irregularmente en España.

Según consta en el documento de la aerolínea, ambos pasajeros fueron arrestados por la policía de Marruecos al aterrizar en el aeropuerto de Casablanca. Estas dos personas, en cambio, no han sido incluidas en el cómputo de las 23 fugadas del avión, de las que 13 siguen desaparecidas y, al menos dos de ellas, se ha confirmado que lograron salir de la isla en un barco hacia Barcelona horas más tarde de huir del aeropuerto.

Manipular la puerta de emergencia

En el informe de la compañía responsable del vuelo MAC437, el pasajero supuestamente enfermo que provocó el aterrizaje en Palma fue evacuado sobre las 19.20. Un tiempo después, que no se precisa en el texto, otro pasajero manipuló el mecanismo de la puerta de emergencia del avión, que quedó inutilizada, y la tripulación le pidió que se sentara. El hombre dijo al resto del pasaje que lo había hecho sin querer.

El relato de los hechos de los tripulantes recogido en el informe continúa una hora después de que el avión aterrizase en Palma. Según explican las fuentes judiciales que han tenido acceso al informe, el comandante atestigua que estando en la cabina escuchó una voz, salió del habitáculo y observó cómo algunas personas estaban empujando a los tripulantes que se interponían y conseguían salir del avión. En el siguiente punto del informe el comandante afirma que comunicó el incidente a la torre de control y que pidió la presencia de la policía. Dos de las personas que salieron del avión fueron detenidas por agentes de la Guardia Civil. En una entrevista a la televisión pública IB3, el abogado Jesús Baena, que defiende a tres de los 12 detenidos, ha defendido que si los guardias consideraban que había delito no deberían haberlos devuelto a la aeronave. La juez en su auto les imputa un delito de sedición y coacciones.

En el informe de Air Arabia, el comandante afirma también que las fuerzas del orden no llegaron enseguida. Los agentes —no especifica el cuerpo— subieron al avión y hablaron con el comandante para comunicarle que tenían que identificar a todos los pasajeros. Fue en ese momento cuando, siempre según el relato del documento de la compañía, se desencadenó un altercado con una persona que terminó siendo detenida por atentado a la autoridad tras pegar un puñetazo a uno de los agentes de la Guardia Civil. El aeropuerto suspendió su operación dos minutos después de recibir el aviso desde el avión y movilizó a la Policía Nacional, que se desplegó para buscar a los fugados en los alrededores del aeropuerto.

Hasta este jueves, 13 personas continúan en paradero desconocido y al menos dos, a pesar del despliegue policial, han llegado a la Península. Un total de 12 personas han ingresado en prisión provisional en la cárcel de Palma, acusados de dos presuntos delitos de sedición y coacciones. A la persona que provocó el aterrizaje de emergencia y su acompañante se les imputa además un delito de favorecimiento de la inmigración ilegal. Las defensas han anunciado que recurrirán el auto de prisión en apelación.