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Bucha, el relato visual de la barbarie, en imágenes Los cuerpos de civiles que jalonaban las calles de Bucha este fin de semana; los cadáveres dispuestos en hileras, uno ante cada casa o las víctimas halladas en sótanos, descansillos y patios, dan fe del horror que las tropas rusas dejaron tras de sí después de replegarse de esta localidad a las puertas de Kiev. El presidente ucranio, Volodímir Zelenski, calcula en más de 300 las personas “torturadas, maniatadas, tiroteadas en la nuca” por los rusos. Las imágenes de los primeros periodistas que entraron en Bucha, incluido el enviado especial de este diario, Luis de Vega, componen el siguiente relato visual de la barbarie. Una de las calles de la localidad de Bucha tras el paso de las tropas rusas. En la casa de la derecha, solo una columna permanece en pie. Al fondo, un tanque ruso carbonizado. Efrem Lukatsky (AP) Luba, de 61 años (izquierda), y Luda, de 69, pasan por delante de un cadáver que lleva varios días delante de un supermercado atacado durante la guerra en Bucha. Algunas de estas personas pueden haber muerto en los bombardeos. Otras muchas presentan señales que sugieren que fueron ejecutadas. Luis de Vega Por ejemplo, los nueve hombres, jóvenes a juzgar por el aspecto de sus cuerpos, que hallaron una muerte atroz en el patio de esta casa. Dos yacían el domingo con las manos atadas a la espalda. Vadim Ghirda (AP) Alguno de estos cadáveres maniatados presentaba un orificio de bala en la parte posterior del cráneo, en lo que parece un tiro de gracia por la espalda. Vadim Ghirda (AP) El cuerpo sin vida de Hennadiy Merchynskyi, de 44 años, yacía con una correa negra rodeando su cuello y cubierto de sangre, en la aldea de Motyzhyn, en el distrito de Bucha, el pasado domingo. AP Vadim Ghirda Los testimonios de los supervivientes dan cuenta de personas abatidas sin razón aparente, simplemente por haberse aventurado a salir de sus casas para buscar comida o agua, como esta víctima que llevaba las llaves del coche en la mano, cuyo cadáver fotografió el enviado especial de EL PAÍS. LUIS DE VEGA Una veintena de cuerpos se concentraban en una sola vía de la localidad: la calle Yablonska y en la aledaña calle Vokzalna. Una imagen de Maxar Technologies, tomada el 19 de marzo, mostraba cómo esos cadáveres estaban ya entonces allí, casi dos semanas antes de la retirada de las militares del Kremlin. Moscú sostiene que la masacre ha sido "escenificada" por Kiev y al mismo tiempo culpa al ejército ucranio de los asesinatos. Maxar Technologies Residentes de Bucha han relatado que los militares rusos penetraron en algunas casas para sacar al padre de cada familia, antes de ejecutarlo. Los cuerpos de la imagen, todos de hombres, aparecen dispuestos en una hilera casi paralela a la de las viviendas. RONALDO SCHEMIDT (AFP) En otros casos, los asesinatos no fueron aleatorios: las víctimas eran responsables locales ucranios. Los cadáveres de la jefa de la aldea de Motyzhyn, su marido y su hijo aparecieron el domingo en una fosa común en las afueras de la localidad. Marko Djurica (REUTERS) Los rusos, según han denunciado los habitantes de Bucha, no solo mataron a personas en la vía pública. También penetraron en las casas para asesinarlos. La fotografía muestra el cuerpo de un hombre en el descansillo de la escalera de un edificio de viviendas. Vadim Ghirda (AP) El plástico blanco que sus asesinos utilizaron para maniatar al hombre cuyos restos aparecen a la izquierda es probablemente el crespón blanco que los ucranios se colocan en el brazo para indicar que su portador es un civil. “Soy un civil, un civil, no disparéis”, gritó Oleg antes de que los rusos le dispararan en Bucha, según testimonios recogidos por este diario. RONALDO SCHEMIDT (AFP) Los militares rusos se instalaron en las casas de los habitantes de la localidad ucrania. Interior de una vivienda de Bucha ocupada y saqueada por las fuerzas del Kremlin. Luis de Vega Una mano emerge de la tierra en una fosa común con cadáveres junto a la iglesia de San Andrés de Bucha. El padre Andrei Golovin explicó a EL PAÍS que el enterramiento alberga a unos 68 cuerpos. Los primeros, asegura, llegaron el 10 de marzo, cuando las fuerzas rusas ya hacía días que controlaban la ciudad. LUIS DE VEGA Unos trabajadores municipales introducen un cuerpo en una furgoneta. En primer término, otro cadáver yace sobre una bolsa de plástico y un lecho de patatas desparramadas. Esta víctima probablemente había salido a buscar comida. Sergei SUPINSKY (AFP) El cuerpo de otro civil, en una calle de Bucha. El hombre aparece desplomado sobre su bicicleta RONALDO SCHEMIDT (AFP) Tres vecinos lloran y se consuelan mutuamente mientras la nieve cae, ante una fosa común en Bucha el pasado domingo. Sergei SUPINSKY (AFP) Los sótanos de la localidad esconden nuevos horrores, que corroboran los relatos de supervivientes que denuncian que las fuerzas rusas torturaron a algunas víctimas antes de quitarles la vida. En la foto, cuatro hombres aparecen maniatados; dos de ellos con la cara cubierta de golpes y de sangre. RONALDO SCHEMIDT (AFP) Empleados municipales introducen en un furgón cadáveres en bolsas negras en Bucha. Los restos de estas víctimas habían sido abandonados en la calle. Zohra Bensemra (Reuters)