Una lampara Maruja

ESTA LÁMPARA con nombre propio, Maruja, está elaborada con finas láminas de chapa de madera que, tanto por su disposición en el diseño como por las vetas de su superficie, ofrece una iluminación cálida y llena de matices. Creación de la firma valenciana LZF, las láminas cuelgan libremente por su parte inferior, de modo que se contonean si les da un poco de brisa. El conjunto recuerda al mismo tiempo a una lámpara de araña, a una pantalla clásica de tela fruncida o a un modelo artesano elaborado con alguna fibra natural. Un trabajo de sínte...

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ESTA LÁMPARA con nombre propio, Maruja, está elaborada con finas láminas de chapa de madera que, tanto por su disposición en el diseño como por las vetas de su superficie, ofrece una iluminación cálida y llena de matices. Creación de la firma valenciana LZF, las láminas cuelgan libremente por su parte inferior, de modo que se contonean si les da un poco de brisa. El conjunto recuerda al mismo tiempo a una lámpara de araña, a una pantalla clásica de tela fruncida o a un modelo artesano elaborado con alguna fibra natural. Un trabajo de síntesis y revisión de patrones tradicionales firmado por el joven estudio ­Gazpacho, fundado hace dos años por las diseñadoras Kar Durán y Concha Rodrigo, con Miguel López como colaborador. Disponible en múltiples tonalidades, desde un elegante color hueso hasta un potente rojo o un apacible aguamarina, su precio parte de los 290 euros.

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