Mina El Hammani: “Si después de ‘Élite’ ya no suena el teléfono, estoy preparada. Ya lo viví y trabajé en un bar”
Su personaje, Nadia, es uno de los más celebrados de la serie: una joven musulmana que cuestiona su existencia y se debate entre lo que le han enseñado y lo que desea. Sin embargo, Mina siempre tuvo clarísimo lo que quería en la vida
“Todos mis amigos son actores, somos unos once o doce y de todos los únicos que trabajamos somos otro colega y yo. Al final tienes que recordar que somos privilegiados por estar en el 8% de intérpretes que podemos vivir de esto”. El Hammani (Madrid, 1993) tuvo vida antes de Élite y se le nota. Y dice estar preparada por si luego deja de sonarle el teléfono. Ya le pasó. “En 2015 estuve trabajando y al año siguiente no me llamó ni dios. Me tuve que meter a trabajar en un bar, pagué mis facturas y fue lo mejor que me podía pasar, la mejor experiencia para entender esta industria”. Con su personaje tiene en común la determinación. Ambas supieron desde los siete años lo que querían. Nadia, estudiar, aunque fuera en un colegio peligroso como una charca de tiburones, y Mina, actuar, cuando cayó en sus manos por casualidad un guion de Ana y los siete.
Nadia termina la segunda temporada con la difusión de un vídeo sexual… Sí, después de eso, tiene que que volver a recomponer la relación con su familia, con su hermano y con una nueva aparición en su vida.
Tu personaje se ha convertido en un icono para muchas chicas musulmanas. Más que para la comunidad musulmana, para chicas de origen árabe, de origen marroquí, que han visto un referente en mi porque quieren se actrices. En esta profesión es complicado, yo tampoco he conocido muchas actrices de origen marroquí que trabajan en España y eso sí me gusta, ser referente para otras chicas.
"La mayoría de mis amigos son actores, somos unos once o doce en el grupo, y solo tenemos trabajo otro amigo y yo. Tener ese runrún es necesario para recordarme a mi misma: 'Bueno guapa, esto no pasa, eres del 8% que esta trabajando”
Hace dos años te cambió la vida. ¿Cómo lo estás gestionando? Como una etapa más de mi vida. Me considero muy vergonzosa, muy tímida y me cuesta pero ser ese pequeño centro de atención también puede ser bonito. Mucha gente viene con una sonrisa en la cara. He tenido que dejar de hacer algunas cosas, como ir en metro si voy sola o ir por el centro y me siento un poco vulnerable. Aunque la gente he dejado de hacer algunas cosas. Aunque la gnte disimule, sabes que te observan…
¿Cómo te imaginas tu carrera después de Élite? Haciendo mucho teatro. Esa idea de no poder fallar la hora y media que dura la función…. Me apetece contar historias muy y que me lleguen esas oportunidades.
¿Qué has visto últimamente en el teatro que te haya volado la cabeza? Fui a ver Jerusalem en el Centro Dramático Nacional porque soy muy fan de María Hervás y también Jauría, que me dejó en estado de shock. Hice una obra en el CND con Julieta serrano, Chete Lera, Jorge Calvo…fue un lujo. Y se me ha quedado la espinita de seguir indagando por ahí.
¿Qué le has prestado tú a Nadia? Pues más bien me ha prestado Nadia a mi, empezando por muchos anillos. Antes no llevaba y ahora me cuesta quitármelos. Hay un vínculo muy fuerte y hay una cosa en concreto que tenemos las dos, esa convicción de saber lo que queremos ser y adónde queremos llegar. Nadia ha estado desde los siete años trabajando para conseguir esa beca porque cree en su futuro y está en los estudios. Yo a los siete años ya dije que quería ser actriz. Fue por Ana y los siete. Tenía una vecina que la tía de su novio era la productora. Recuerdo ver una separata del guion y pensar: ¿cómo se hace esto? Eso se quedó ahí y a los doce años le dije a mi madre que me llevara a teatro, ella no quiso. Tenía miedo o algo, pero como yo tenia muy clara mi meta, trabajé en muchas cosas, me pagué muchos cursos y hasta el día de hoy.
Estando tan vinculada al teatro, cuando te llegó la oportunidad de Netflix imagino que no era lo que habías pensado. Fue mi mejor año de trabajo. Estaba haciendo la obra en el CND y la serie Servir y proteger en TVE. Hice el casting de Élite y luego me olvide totalmente. Hasta el día que terminaba de rodar la serie, que me llamó mi representante para decirme que me habían ofrecido el papel de Nadia. Yo ya estaba pensando que iba a estar en paro y de repente, ta-tán [imita el característico sonido que acompaña la cortinilla de la plataforma]… ¡Netflix! No creo en la suerte, pero tenemos el privilegio de trabajar en lo que nos apasiona. La mayoría de mis amigos son actores, somos unos once o doce en el grupo, y solo tenemos trabajo otro amigo y yo. Tener ese runrún es necesario para recordarme a mi misma: “bueno guapa, esto no pasa, eres del 8% que esta trabajando”.
¿Estás preparada por si eso vuelve a pasar, que deje de sonar el teléfono? Ya me pasó en 2015. Estuve trabajando y al año siguiente no me llamó ni dios. Me tuve que meter a trabajar en un bar, pagué mis facturas y fue lo mejor que me podría pasar, la mejor experiencia para entender esta industria. Un día tienes trabajo y al día siguiente no te suena el teléfono y eso puede prolongarse, tienes que estar preparado.
¿Agradeces que la fama y el éxito masivo te haya llegado cuando ya tenías esa experiencia? Siempre se lo digo a mis amigos y mi familia, que no sé yo cómo lo hubiera gestionado si este hubiera sido mi primer trabajo, aunque luego hablo con Omar [Ayuso, su compañero en la serie], para el que es su primer curro, y no conozco a nadie que esté tan centrado. Pero ha sido bonito llevarlo con los demás. Si me pasa algo, puedo coger el teléfono y sé que once personas me van a entender. Es un momento muy bonito, pero también hay cosas duras y las hablamos. Hacemos terapia todo el rato.
¿Cómo se llama vuestro grupo de whatsapp? Élite Pon. Nos reímos mucho en ese grupo. Yo entro ahí y me encuentro con 20 conversaciones a la vez. Momo manda muchos memes…
¿Cuánta cuerda le ves a Élite? ¿Te ves rodando muchas más temporadas? Espero que estemos mucho tiempo. Es una serie que ha tirado muchísimo, tiene unas historias muy potentes y podría seguir desarrollándose. Quiero ver cómo sucede todo y cómo va desarrollándose.
Esta entrevista es un avance del gran reportaje sobre Élite que publicaremos en el próximo número de ICON, a la venta desde el sábado 4 de abril.
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