La única hija de Elvis Presley se declara en bancarrota
Lisa Marie heredó una fortuna de 100 millones de dólares de los que hoy dice que le quedan 11.000 y deudas por 16 millones
Elvis Presley, el rey del rock, se revolvería en su tumba de Graceland si supiera que los errores de su vida vuelven a repetirse en Lise Marie, la que era su niña adorada cuando él murió en 1977.
Entonces, su hija sufrió la desaparición de su padre sumido en las adicciones y el declive de la fama que lo elevó al reino de las estrellas de la música de la época, y recibió con solo nueve años una fortuna estimada en unos 100 millones de dólares (80 millones de euros). Cuarenta años después y con 50 años de edad la hija del mítico cantante de rock que revolucionó los escenarios con su movimiento de pelvis, se ha declarado en bancarrota. Según ha contado Lisa Marie Preysler al portal TMZ, de aquella herencia le quedan 14.000 dólares y deudas por impuestos y préstamos hipotecarios que rondan los 16 millones de dólares.
Según su propia versión, Lisa Marie no liquidó sus impuestos desde 2012 hasta 2015, tiene una hipoteca de una casa que compró en Inglaterra que no puede pagar y para la que tampoco encuentra comprador aunque lleva meses intentándolo y las deudas de sus tarjetas de crédito suman otros 500.000 dólares.
Según la misma publicación, Lisa Marie ha demandado a su exrepresentante, Barry Siegel, por “manejo imprudente y negligente de sus finanzas”. Una afirmación a la que Siegel ha contestado con un comunicado en el que afirma que Lisa Maire “ha malgastado su dienro durante años”, declaración que ha acompañado con documentos que respaldan sus palabras. En dichos papeles acredita que en 2004 Lisa Marie vendió el 85% de Elvis Enterprises –la compañía que controla todas las propiedades físicas y los derechos de Elvis Presley– y que desde esa fecha ha gastado el doble del dinero que recibió en herencia.
Otros medios, como el portal Radar Online no han tardado en hacer hincapié en que Lisa Marie ha abusado de la cocaína y la mezcla de alcohol con pastillas. Una información que consta en documentos judiciales de agosto de 2017, cuando Presley se estaba divorciando de Michael Lockwood con quien se había casado en 2013. En el juzgado ella declaró que durante los últimos tres años de su matrimonio “era un desastre y no podía dejar de consumir. Durante el último año abusé terriblemente de la cocaína”. También reconoció ser adicta a los analgésico y opiáceos que a veces mezclaba con bebida, y que había intentado dejarlo al menos tres o cuatro veces acudiendo a México a centros de rehabilitación. Su proceso de divorcio de Lockwood es otro de los temas que también sigue abierto.
Lisa Marie repite la historia de descontrol que caracterizó los últimos años de su padre, Elvis Presley. El que fue una de las figuras más importantes de la cultura popular del siglo XX cayó tras su divorcio de Priscilla Presley, con quien estuvo casado siete años, en una vorágine de relaciones sentimentales y adicciones que le convirtió en una grotesca caricatura de la estrella de la canción que había sido. Con exceso de peso y fármacos, en los últimos años casi era incapaz de finalizar en condiciones un concierto breve y finalmente falleció en Memphis la noche del 16 de agosto de 1977, justo antes de iniciar una nueva gira que deseaba y temía por igual. La causa final fue un infarto agudo de miocardio. El rey del rock tenía solo 42 años.
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