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El PSOE quiere bajar al 10% el IVA de las bicicletas

Los socialistas han registrado una proposición en el Congreso con una serie de rebajas fiscales para fomentar el uso de la bici, entre ellas pasar del 21% de IVA al 10%

Una ciclista por las calles de Barcelona.
Una ciclista por las calles de Barcelona.Julian Rojas
Pablo León

Menos impuestos para fomentar el uso de las bicicletas. Esa es la idea de la proposición no de ley que los socialistas han presentado en el Congreso de los Diputados. “Reducir el actual 21% de IVA al 10% en la compra de bicicletas, sobre todo en las urbanas, supondría una rebaja en el precio final coherente con el objetivo de promover vehículos que hagan posible la movilidad sostenible", explican en la iniciativa.

Actualmente, y a pesar de que la bici es un vehículo sostenible y una estrategia clave en la movilidad sostenible de las ciudades, la compra de una bici posee la misma fiscalidad que un coche. Los socialistas afean al Gobierno del PP que ambos vehículos paguen los mismo impuestos ya que consideran que la reducción del tipo impositivo a las bicicletas fomentaría su adquisición “y por tanto reduciría las emisiones de dióxido de carbono, el ruido, la congestión en las calles y mejoraría el medio ambiente”.

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El PSOE lamenta en su proposición que la bicicleta no se haya incluido en el Plan MOVEA 2017 del Ministerio de Industria, que subvenciona la compra de vehículos eléctricos. Dotado con 16,6 millones —una ridiculez en comparación con lo que aplican otros países europeos: Francia dedicó el año pasado 347 millones a este cometido—, las ayudas se limitaban a las motos y coches eléctricos. Pero no a las bicis. AMBE (Asociación de Marcas de Bicicletas de España) denunció que las bicis eléctricas forman parte de este tipo de planes desde 2013, con descuentos que llegan a los 200 euros. Sin embargo, en MOVEA 2017 las bicis han desaparecido. El Ministerio de Industria justificó no incluir las bicis por “lo farragoso que resulta gestionar subvenciones tan pequeñas con miles de puntos de venta”. Es cierto que gestionar las ayudas a la bicicleta eléctrica de 2016 fue bastante complicado, pero desde AMBE consideran que con la decisión de borrarlas de su plan de subvenciones, “el Ministerio demuestra no sólo una notable falta de interés ante la bicicleta eléctrica, sino que además se desentiende por completo de cualquier objetivo de fomentar los hábitos saludables y los medios de transporte activos”.

En su proposición, el PSOE pide que se recupere la bici eléctrica para el Plan MOVEA de 2018. Los socialistas también recomiendan analizar y evaluar la posibilidad de que las empresas incluyan la compra y el uso de las bicicletas como parte de la retribución flexible a sus empleados, como ahora ocurre con los cheques de comida, el servicio médico o los vales de transporte. Como remarca el texto del PSOE, la idea de la retribución flexible y los pedales no es nueva: hace tres años, en febrero de 2014, la empresa Grass Roots presentó al Ministerio de Hacienda un manifiesto en esta dirección. El texto asemejaba esta desgravación a las que se aplican por el uso del transporte público, que se permiten en algunas comunidades como Madrid. “De esta manera, la bici se pondría al mismo nivel que otras prestaciones de retribución flexible como son los cheques de comida, los cursos de formación o la compra de equipo informático”, explican desde Grass Roots. “Con esta medida, los trabajadores se ahorrarían un porcentaje importante en el precio de la bicicleta, que es la parte que correspondería al IRPF. El ahorro depende de diferentes factores como la banda salarial del empleado y su situación personal”. Países como Alemania, Holanda o Reino Unido cuentan con unas 34.000 empresas que se han acogido a esta iniciativa.

Te pago por venir en bici al trabajo

Otra propuesta económica, que no recoge el PSOE en su texto, para fomentar que las personas usen la bici de manera cotidiana es pagar a aquellos empleados que acudan al puesto de trabajo a pedales. El modelo —que se testó en Francia en 2014 abonando 0,25 euros por kilómetro recorrido en bici— lo aplica Liberty Seguros en Madrid, Bilbao y Barcelona desde 2016. La empresa, pionera en España en el fomento de la bici motivando económicamente a sus trabajadores, abona 0,37 euros por cada kilómetro recorrido. “En los primeros seis meses, el número de ciclista se multiplicaron por ocho en Bilbao; se duplicaron en la sede de Barcelona y se triplicaron en Madrid”, cuentan desde la aseguradora.

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Sobre la firma

Pablo León
Periodista de EL PAÍS desde 2009. Actualmente en Internacional. Durante seis años fue redactor de Madrid, cubriendo política municipal. Antes estuvo en secciones como Reportajes, El País Semanal, El Viajero o Tentaciones. Es licenciado en Ciencias Ambientales y Máster de Periodismo UAM-EL PAÍS. Vive en Madrid y es experto en movilidad sostenible.

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