"Por lo que conozco a mis rivales me dan preocupación"
El alcalde y candidato del PSE al Ayuntamiento de Vitoria, Patxi Lazcoz, cree que una reelección depende más del trabajo realizado que de factores externos. Y cita el ejemplo de Odón Elorza en San Sebastián: "Le han tocado vivir mejores y peores momentos, no solo de coyuntura económica, sino también de la marca socialista, y ha ganado siempre, por sí mismo y su trabajo. Voy con la ilusión de emularle al examen del 22-M".
Pregunta. ¿Los 18.000 parados en Vitoria decidirán el 22-M?
Respuesta. Independientemente de la sensación que tengamos, somos una de las capitales con menos tasa de paro y tenemos un programa muy concreto de ayudas a las personas en dificultad que hace que el trasiego sea más digno que en otros sitios. En otras ciudades el paro lo ves en la calle. Esa sensación no la tenemos en Vitoria.
"El desgaste del PSOE influirá, pero la derecha ha causado la crisis"
"Hemos sentado las líneas básicas de la Vitoria del siglo XXI"
"No intentaré sumar si no soy primero. Es razonable respetar la lista más votada"
"Solo hay una prioridad, el empleo y generar actividad económica"
P. ¿Le preocupa que el desgaste del PSOE y Zapatero afecten a su resultado?
R. Algo influirá, no me cabe duda, pero lo que me preocupa es cómo hacer un frente a la crisis. En este mundo global ha sido la derecha económica internacional especulando la que provocó la crisis económica. Confío en la sensatez de la ciudadanía.
P. ¿Tienen perfil de alcaldables sus rivales, Javier Maroto y Gorka Urtaran?
R. Por lo que los conozco y conozco sus discursos, lo que tengo es una gran preocupación. En el caso de Maroto es evidente, porque estuvo en el no permanente toda la legislatura, no cree en la ciudad ni en que podamos afrontar los retos actuales. En el caso de Urtaran, pesa mucho la falta de experiencia en la actividad municipal. Pero son los ciudadanos quienes deciden.
P. El PNV insiste en que el pacto PP-PSE está cerrado.
R. El PNV tiene obsesión con este tema, pero no conozco a nadie en Vitoria que se crea eso después de lo ocurrido en la legislatura, con el PP poniéndole zancadillas a Vitoria porque no le interesaba que progresase con un alcalde socialista. Es falso. Lo que tengo claro es que el 22-M, tras pronunciarse los ciudadanos, como nunca ha habido mayoría absoluta en su historia democrática, harán falta acuerdos.
P. ¿Hay que respetar la lista más votada?
R. Es lo razonable. Nunca ha ocurrido en Vitoria que no fuese el alcalde el más votado.
P. ¿Entonces no intentaría sumar si no fuese el primero?
R. En principio, no.
P. ¿Se quedará al frente de la oposición si no es reelegido?
R. Es el deber de quienes nos presentamos. Lo he demostrado en otras ocasiones. En 2003 no me marché, me quedé. Me verían como siempre trabajando por Vitoria. En este caso decido yo y es una decisión personal.
P. ¿Cuál cree que ha sido su mayor acierto en el mandato?
R. Más que una cosa concreta, ha sido el proceso de cambio tranquilo. Vitoria está avanzando hacia un nuevo modelo. Es una ciudad más abierta, capaz de reconocer su potencial a la hora de jugar un papel en su entorno y a nivel internacional. Hemos sentado las líneas básicas de la Vitoria del siglo XXI.
P. ¿Y su mayor error?
R. La nevada del año pasado. La puesta en servicio que hicimos no fue la más adecuada. Aquello lo tengo clavado como una espinita personal.
P. Los analistas suelen coincidir en que la capitalidad verde europea es su logro más visible.
R. Seguramente es el éxito de ciudad que, viniendo de un componente político e institucional, más emoción ha generado en la ciudadanía. Pero hay otros elementos que pasan más desapercibidos: muchos vitorianos han redescubierto el Casco Medieval, o el turismo, en el que hemos ido batiendo récord tras récord.
P. Sus adversarios critican que la suya ha sido un mandato de puro marketing.
R. Es lo que tienen que decir porque es lo que toca, pero cuando me paseo por los barrios, que lo he hecho toda la legislatura, el marketing no existe. Todo lo que está hecho se puede tocar.
P. ¿Cómo cree que será la relación con Bildu?
R. Lo que espero, sobre todo, es que no tengamos que llegar a aplicar la ley de Partidos y expulsar a ningún concejal o concejala si incumplen su palabra. Ojalá sea esta la buena, como dicen en la calle. Ojalá. Creo que el tribunal tomó la decisión que era razonable conforme a la Constitución. La hipótesis de pactar a largo plazo con Bildu me parece lejana.
P. ¿Qué le parece que de repende el asunto de la apertura de una mezquita aparezca de forma abrupta en campaña?
R. Me parece triste e irresponsable que Javier Maroto rompa la identidad plural y diversa de Vitoria para sacar rédito electoral. Sobre todo porque [cuando el PP gobernaba el Ayuntamiento] abrió tres centros culturales religiosos en el Casco Medieval y además cogió recursos públicos, 83.000 euros, y colaboró en la rehabilitación de una de esas tres mezquitas. Maroto está echando gasolina a algo que se puede ir de las manos, aunque confío en que el barrio de Zaramaga siga siendo como siempre tolerante, si nadie prende fuego.
P. ¿Le parece una medida pragmática limitar las ayudas sociales a quienes lleven cinco años empadronados?
R. Maroto está engañando al decir que hay un efecto llamada con las ayudas sociales. En 10 años, somos la ciudad española con menor crecimiento de población inmigrante. Somos el Gobierno municipal que más medidas ha tomado contra el fraude en las ayudas.
P. ¿Cuáles serán sus proyectos prioritarios si sale reelegido?
R. Solo hay uno, el empleo. Todas aquellas actuaciones que desde ya generen actividad económica serán prioritarias. El gran plan de inversiones, aportado entre el Ayuntamiento y otras instituciones a lo largo de los próximos años, supondrá mucha ilusión. Vamos a tener casi 800 millones de euros de inversión. Se están llevando a cabo las obras de tres centros de salud, el BAI Center, este año empiezan los centros cívicos de Salburua y Zabalgana. Tenemos también la primera fase de la estación intermodal, el nuevo complejo de oficinas municipales, las obras del Plan Alhóndiga, la continuación del plan de inversiones del Casco Medieval, el soterramiento del ferrocarril, por citar las más importantes. Tenemos 18.000 motivos para apostar por estos proyectos.
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