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Alejandro Sanz deja Warner tras 20 años en la compañía

El cantante busca ganar público internacional con Universal

Diego A. Manrique

El mercado de invierno todavía puede deparar sorpresas: Alejandro Sanz abandona su discográfica de toda la vida, Warner Music, para pasar a Universal. En términos futbolísticos, el fichaje sería como saltar del Atlético de Madrid -Sanz es colchonero militante- al primer equipo en potencia económica, sea el Manchester United o el Real Madrid. En el escalafón de discográficas, hay menos dudas: Universal Music Group está en el primer lugar, seguida por Sony y Warner.

Para Jesús López, máximo directivo de Universal Music para la Península Ibérica y Latinoamérica, "es el resultado de un año de negociaciones muy agresivas por parte de esas tres disqueras. Universal le venía muy bien: dominamos el 50% del mercado latino en Estados Unidos. Pero no teníamos un artista español de su perfil en el catálogo".

A través de Twitter, Alejandro Sanz anunciaba el cambio con palabras de concordia: "Bueno, ahí va. Después de 20 años de mucho trabajo y mucho cariño empiezo una nueva etapa en Universal, con toda la ilusión y todas las ganas de hacer cosas grandes. Gracias a tod@s l@s trabajadores de Warner por tanto. Os quiero y os querré siempre. Y muchas gracias a tod@s l@s trabajadores de Universal por el entusiasmo. Vamos a por todas". El mensaje se enviaba después de una noche de celebración en Miami, donde se firmó el contrato. El pacto ha causado sorpresa en el mundillo musical español: tanto Warner como Sony son valoradas como buenas compañías para los artistas locales, mientras Universal sufre de carencias crónicas en el repertorio nacional (aparte de estar afectada por un reciente y brutal ERE). Sin embargo, se requiere entender el desplazamiento desde una perspectiva global.

Alejandro Sanz comenzó en Warner con un estilo italianizante, que evolucionó hacia un sonido más caribeño, con presencia de elementos flamencos y funk. Con una u otra onda, ha logrado un impacto masivo: se le calculan ventas superiores a los 20 millones de copias. El siguiente paso sería entrar en el mercado anglo y sus satélites. Según Jesús López, vecino de Sanz en Miami, "eso no implica necesariamente cantar en inglés. Alejandro ya ha grabado con artistas como The Corrs, Alicia Keys o Destiny's Child. No se siente intimidado. La cuestión es que esos mercados acepten a Alejandro tal como es. El acuerdo es el reconocimiento de que Universal tiene mecanismos bien aceitados para lanzarle fuera de su público natural".

José Carlos Sánchez, responsable de Warner Music en España, es más tajante: "Respetamos las decisiones de los artistas cuando deciden cambiar de aire y hay billetera mata galán". Así dicen en Buenos Aires que más vale cartera llena que buena planta a la hora de seducir; en España, tenemos expresiones equivalentes, pero más groseras.

Alejandro Sanz, en Madrid en 2009.
Alejandro Sanz, en Madrid en 2009.REUTERS
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