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Tribuna:El Papa visita España
Tribuna
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Valores compartidos

Barcelona es una ciudad que cuida sus valores, entre los cuales la convivencia, la paz y la solidaridad hacia los más desprotegidos ocupan un lugar principal. El catolicismo es una referencia histórica y cultural de primer orden. Constituye una referencia espiritual y moral para miles de ciudadanos. Desde estas dos constataciones, y desde el respeto por todas las culturas y creencias que han contribuido y contribuyen a la construcción de nuestra ciudad y nuestro país, nos sentimos honrados con la visita del Papa, al mismo tiempo que la tomamos como una nueva oportunidad de mostrarnos como somos.

Barcelona es una ciudad orgullosa de su catalanidad, por eso queremos recibir a Benedicto XVI con senyeres en los balcones y nos congratulamos de que oficie en catalán una parte de la ceremonia; la lengua es parte esencial de nuestra manera de ser, de sentir y de pensar. Y Barcelona es tolerante e integradora, por eso estoy seguro de que se podrán expresar con libertad y civismo tanto aquellos que profesen admiración por el Papa como los que tengan alguna objeción.

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El 'milagro' de la Sagrada Familia

La visita supone un acontecimiento de primera magnitud internacional. Es un éxito para la ciudad y un homenaje a la figura y la obra de Gaudí. Y un nuevo estímulo a la proyección de la Sagrada Familia, una de nuestras señas de identidad más queridas, que tras la dedicación por Benedicto XVI, añadirá a su condición de monumento el valor de convertirse en uno de los puntos de encuentro con mayor carga simbólica del catolicismo.

Este fin de semana debe prevalecer la auténtica Barcelona: la tolerante, la cívica, la siempre respetuosa, integradora y acogedora con la diversidad. La que hace de la convivencia su bandera.

Jordi Hereu es alcalde de Barcelona.

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