La deuda del grupo Sacresa supera los 2.635 millones

El pasivo de la inmobiliaria Sacresa, que ayer fue declarada en concurso de acreedores por el juez, supera los 2.635 millones de euros, mientras que el activo de las cuatro empresas que conforman el grupo de la familia Sanahuja alcanza los 2.515 millones. La mayor deuda de la inmobiliaria se concentra en una de las dos filiales de terrenos para promoción de casas.

La situación de insolvencia de Sacresa llevó a la compañía a pedir el concurso anticipado el pasado marzo, con una deuda que entonces el grupo cifraba en 1.660 millones, de los cuales más de 1.000 millones se correspondían a financiación bancaria y otro grueso de 400 millones a operaciones con derivados. Sin embargo, el pasivo final de las cuatro empresas declaradas en concurso -Sanahuja Escofet, Sacresa Terrenos Promoción, Cresa Patrimonial y Sacresa Terrenos 2- supera los 2.635 millones.

El titular del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Barcelona, José María Ribelles, ha tardado apenas dos semanas en declarar el concurso, según fuentes cercanas al proceso, porque pudo examinar toda la documentación durante la etapa del preconcurso. Los autos del juez señalan que Sacresa se ha visto abocada al concurso voluntario después de que efectuara "un esfuerzo financiero muy importante, con recursos facilitados por entidades bancarias" antes de que explotaran la crisis inmobiliaria y financiera.

Tercer mayor concurso

Además de la actividad promotora, el endeudamiento viene dado sobre todo por la compra de Metrovacesa, para la cual obtuvo también un crédito del Instituto Catalán de Finanzas (ICF). El fiasco de esa operación desembocó en que Metrovacesa tuviera que ser rescatada por las entidades financieras y en el concurso de Sacresa, cuyos acreedores no aceptaron un convenio anticipado y tuvo que presentar la tercera mayor suspensión de pagos en el sector, después de las de Martinsa Fadesa y Habitat.