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Entrevista:RUBÉN BARAJA | Centrocampista del Valencia | LIGA EUROPA | Ida de los cuartos de final

"Pienso tan rápido como hace 10 años"

El fútbol se juega con la cabeza, recuerda Rubén Baraja (Valladolid, 1975), resistiéndose a que le jubilen y repasando su oficio de mediocentro durante 17 años. "La clase no se olvida", bromea como despedida El Pipo, titular hoy, a los 34 años, frente a su ex equipo.

Pregunta. ¿Hay lugar para la creatividad?

Respuesta. Partiendo de unas reglas tácticas básicas, cada uno, en su zona, puede llegar a ser creativo. Un buen pase al espacio para la entrada del interior o el delantero o una buena cobertura. La creatividad no tiene por qué ser sólo ofensiva. Dentro de la estructura de un equipo, la creatividad te hace ganar partidos.

P. ¿Qué se siente tras un gran pase?

R. El trabajo bien hecho. No tiene nada diferente de un trabajo normal. La única diferencia respecto a un albañil es que nos juzga mucha gente. Y se magnifica. Pero la sensación es la misma.

"La única diferencia del futbolista respecto al albañil es que nos juzga mucha gente"
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P. ¿Qué queda del joven que salió del Valladolid en 1993?

R. Los valores aprendidos desde pequeño: el equipo, por encima de individualidades; respetar la profesión, luchar mucho para llegar y luego para mantenerse...

P. Elija un par de momentos.

R. La mejor decisión, que el Valencia, que era subcampeón de la Champions, viniera a por mí cuando el Atlético estaba en Segunda. Y otro muy importante fue cuando tuve una lesión muy grave de rodilla, siendo jovencito, y tuve la suerte de que un entrenador, Carlos Aguiar, volviera a apostar por mí en el Atlético.

P. ¿Empezó de interior derecho?

R. Por el medio siempre. Hay que ser consciente de tus virtudes y tus defectos. Por dentro puedo dar buen rendimiento y por fuera podría quedar en evidencia.

P. ¿Tan mal está físicamente?

R. No me veo mal. En una temporada en la que he jugado poco, con pocas oportunidades, estoy rindiendo bien ahora que juego seguido.

P. ¿Debe un mediocentro ser rápido?

R. En mi caso, no ha sido un hándicap [no serlo]. Si no era rápido hace 10 años, tampoco lo voy a ser ahora. La velocidad se mejora muy poco. Lo importante es tener velocidad mental. Y, en ese sentido, pienso igual de rápido que hace 10 años.

P. Pero ha perdido llegada.

R. Por la manera de jugar de [Unai] Emery, el equipo se inclina hacia delante. Los cuatro de arriba y los laterales se vencen mucho. Eso nos obliga a los mediocentros a buscar el equilibrio, a sostener al conjunto. Eso te resta llegada. Claro que, si tuviera 20 años, me soltaría más.

P. ¿Quién le llena los ojos?

R. Cesc es muy consistente, con muchísima llegada, muy participativo en el ataque y la defensa. Es su mejor año. Y Xavi sabe manejar los partidos.

P. ¿Se está despidiendo de Mestalla?

R. No, no me hecho ese planteamiento. Pienso en el partido frente al Atlético y otras personas se encargarán de si puedo seguir o no un año más aquí.

P. ¿Cómo cree que va a combinarse hoy con Fernandes?

R. Al no ser ninguno específicamente defensivo, uno se va y el otro se queda. Buscar el equilibrio con coberturas y hablándonos mucho. Si tienes dos mediocentros que saben jugar y tienes la pelota, manejas el partido con menos riesgo de que te hagan daño.

P. ¿Claves de la eliminatoria?

R. Nos interesa un resultado corto, no entrar en la vorágine de un tanteador loco. El Atlético es capaz de lo mejor y lo peor. Se trata de no ir al Calderón, un campo especial en el que se viven sensaciones diferentes, con un resultado incómodo.

P. ¿Cómo ve a Banega?

R. No debe acomodarse en sus cualidades, sino pulir los defectos. La clave es que tenga ambición para mejorar y no ponerle la presión de que funcione o no el equipo. Con 21 años, no debe creerse que lo sabe todo.

P. ¿Ha llegado a ese punto en el que piensa: "Ojalá hubiera sabido esto antes"?

R. Sí, cosas que antes me molestaban las meto ahora en el bolsillo. Por mi carácter fuerte, tenía distintas formas de pensar que los entrenadores y ahora veo que esas cosas tenían un sentido. Cuando estás jugando en una zona y hay mucha gente, lo más fácil es darte la vuelta y cambiar al otro lado, donde hay menos y vas a poder profundizar. En mi zona es muy importante tener paciencia y esperar tu momento. El mediocentro debe esperar a que la pelota le llegue y no ir a buscarla y meterse en sitios inconvenientes. Por ejemplo, Albelda recupera ahora muchas más veces la pelota corriendo menos que antes.

P. Jugar al primer toque...

R. Jugar lo más rápido y lo más seguro posible. Sobre todo, en determinadas zonas. El Barça tiene el balón y la paciencia para esperar el momento para desequilibrar. Va de un lado a otro sin prisa hasta que encuentra el espacio justo con superioridad numérica.

P. ¿Qué es lo más importante de lo que aprendió?

R. La mentalidad ganadora. [Rafa] Benítez la despertó a pesar de que [Héctor] Cúper también era un obsesionado de ganar. Eso se genera en cada detalle, en cada jugada, en cada partido.

P. ¿Se arrepiente de su amistad con un presidente que arruinó al Valencia [Juan Soler]?

R. Por encima de eso está mi compromiso. Te tienen que valorar en el campo. He dado la cara, independientemente de haber estado un día bien o mal. Nunca me he escondido. Lo otro es una anécdota.

Rubén Baraja.
Rubén Baraja.DIARIO AS

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