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El sector de la cerámica ve el fin de la crisis para 2010

Ascer constata la recuperación del mercado exterior

María Fabra

El presidente de la patronal cerámica (Ascer), Joaquín Piñón, situó ayer en el segundo semestre de 2010, dentro de nueve meses, el inicio del fin de la crisis. "Nos quedan nueve meses de travesía por el desierto", señaló, tras afirmar que el sector está percibiendo la recuperación de, al menos, parte del mercado exterior. "Indudablemente, mercados como Francia, Alemania e Inglaterra ya se están recuperando", y el resto de mercados internacionales "se van a recuperar muy pronto", dijo después de poner el acento en la importancia de las exportaciones para el sector cerámico en el que "su salida se sitúa, en un 80%, en la exportación".

Joaquín Piñón manifestó su deseo de ser prudente pero explicó que mientras que el descenso de las ventas exteriores cayeron entre enero y junio más de un 26%, "en junio sólo disminuyó un 20%". Con estos datos, en su opinión, "en cuanto se recupere el mercado nacional, posiblemente recuperaremos nuestras ventas e, incluso, podríamos superarlas". Respecto al resto de mercados internacionales, el dirigente de Ascer minimizó la marcha de las ventas en Estados Unidos "porque nunca será nuestro mercado" y señaló otros como México, Brasil o China en los que "tenemos que mejorar".

El presidente de la patronal, junto al resto de la junta rectora de la asociación, se reunió ayer con el nuevo consejero de Economía, Vicente Rambla, al que instó a que la Generalitat "impulse y ultime el Plan Renove". Piñón puso como ejemplo Navarra, donde este plan ya está aprobado.

Otra de las reclamaciones de Ascer a Rambla fue el de una "ayuda a la financiación del sector vía avales". El consejero se comprometió a "ponerse a trabajar" para lograr el establecimiento de "líneas de descuento en las exportaciones del sector mediante avales que podrían articularse a través de la Sociedad de Garantía Recíproca y el Instituto Valenciano de Finanzas". Además, la patronal azulejera solicitó una "ayuda simbólica pero suficiente para las prejubilaciones", ante lo que el consejero de Economía respondió que la Generalitat "ayudará a las empresas inmersas en planes de prejubilación aunque las políticas del Consell estén enfocadas al fomento del empleo".

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