_
_
_
_
_

El imposible gobierno de Benitatxell

El PP local se rebela contra Ripoll y plantea una coalición de concentración

Gobernar Benitatxell se antoja hoy misión imposible. El pleno de ayer, en el que se dio cuenta de la dimisión por presunta corrupción urbanística del ex alcalde, el independiente Juan Cardona, sirvió también para que la Subdelegación del Gobierno anunciara la anulación de la moción de censura que presentaron contra Cardona el PP y cuatro antiguos ediles de la formación del ex alcalde, el Partido Independiente Democrático de Benitatxell (Piddeb), que habían decidido pasarse a las filas populares. La Subdelegación considera que la moción carece de sentido al presentarse cuando Cardona ya había renunciado.

De esta forma, Benitatxell queda sumida en el caos político. Ahora mismo, sólo hay una edil que realiza tareas de gobierno, la alcaldesa accidental Hannelore Rheindorf, también del Piddeb y acusada, como Cardona, de un presunto delito de cohecho por haberle exigido 50.000 euros a un promotor a cambio de mantener urbanizables sus terrenos. Rheindorf apenas habla castellano y muchos expedientes están paralizados. El 4 de marzo se celebrará el pleno en el que debe nombrarse al alcalde definitivo, cargo al que, sin embargo, ya no opta la candidata que proponían en la moción el PP y los cuatro tránsfugas, la ex independiente Nieves García, pues no fue cabeza de lista en las elecciones. Si cada una de las fuerzas políticas se vota así misma, sería Rheindorf la designada, pese a que ya no cuenta con ningún apoyo del Piddeb si se exceptúa al edil que entrará para sustituir a Cardona, el holandés Guillermo Pragt, cuya posición es una incógnita.

"Queremos hablar con todos para lograr un gobierno más estable"

Una solución sería que tras finalizar ese pleno, el PP y sus cuatro nuevos aliados plantearan una nueva moción de censura, pero ahora esa solución es poco probable: ayer, y por sorpresa, los populares locales plantaron cara a la dirección provincial del partido de José Joaquín Ripoll, que fue la que urdió el voto de censura acabado en fiasco, y abrieron la puerta a un gobierno de concentración a las otras fuerzas de la oposición, el BNV, Ciutadans per Benitatxell y el PSPV. "Queremos hablar con todos para lograr un gobierno que acabe con estos dos años de inestabilidad" dijo el edil popular Antoni Colomer, quien desveló que, al contrario de lo que afirmó la cúpula ripollista, ninguno de los tránsfugas pertenece aún al PP a excepción de Nieves García, quien milita desde 1996 pese a que en las últimas elecciones se presentó por el Piddeb. Por cierto, que el propio Cardona también está aún afiliado al PP.

Hay otras opciones, como que los cuatro tránsfugas voten a la número 1 de los populares locales, Josefa Ronda, o que la corporación dimita en bloque para que se haga cargo del Ayuntamiento una gestora que acabe con esta incertidumbre, precisamente cuando Benitatxell está tramitando un nuevo Plan General y se enfrenta al polémico proyecto, impulsado por el Piddeb, de un puerto deportivo en sus acantilados protegidos por la Unión Europea.

Ayer, el portavoz del Bloc, Josep Femenia, consideró esta situación "inadmisible", recordó que Cardona ha tardado siete meses en dimitir desde que fue detenido y acusó a los cuatro ex concejales del Piddeb de pasar de "cómplices a tránsfugas". "Ni siquiera quisieron aprobar una comisión de investigación sobre la trama urbanística y es todo un atropello al pueblo", concluyó.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_