"Un dolor incomprensible"
Un millar de personas condena la muerte de Carolina por un acosador
"Podría decirte tantas cosas, tantos tópicos. ¡Guapa! Buena hija, buena sobrina... Me han quitado a mi prima, a nuestra prima. Es un dolor incomprensible". Con un llanto sin consuelo, Raúl, primo de Carolina Planells Esteve, de 23 años, asesinada la noche del pasado domingo en Paiporta, fue la voz de la familia y de los amigos en el acto que ayer se celebró en la plaza de España de Picanya contra la violencia machista que acabó con la vida de la joven y dejó herida de gravedad a su amiga y socia, Susana, de 29 años, ingresada en el Hospital General. Mohamed Ali Moussa, marroquí de 30 años, pasará hoy a disposición judicial acusado de un delito de asesinato y otro en grado de tentativa. Se encaprichó de Carolina, la acosó, la persiguió. El pasado junio las chicas lo echaron del bar y juró que volvería a matarlas. Regresó varias veces. El domingo pasado cumplió su amenaza. Y ayer, Miguel y María José, los padres de Carolina, su familia, y la de Susana, recibieron el cariño de vecinos y amigos. Junto a ellos, con flores y pancartas, se condenó una vez más la violencia machista en palabras de los dos alcaldes y con cinco minutos de silencio de un millar de asistentes. Carolina será enterrada hoy.
