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Tribuna:Dinero & inversiones
Tribuna
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Ciclo de activos

Después de un largo año de creciente incertidumbre sobre la liquidez y solvencia del sistema financiero, los mercados no han podido evitar descontar el negativo sentimiento sobre el mismo (y sobre su repercusión sobre la economía real), que se ha traducido, entre otros, en una intensa aversión al riesgo y, por ende, en un continuo repunte de la volatilidad, con unos precios a la baja.

Ante esta situación, los inversores han optado por adaptar e incluso, en algunos casos, redefinir el perfil de riesgo de sus carteras. En este sentido, la reducción del riesgo ha sido la principal directriz que ha venido acompañada por una clara reasignación del patrimonio entre distintos activos, una decisión "peculiar" que ha roto con los esquemas de reasignación de activos previos a la crisis y que ha perjudicado especialmente a la industria de fondos de inversión.

El deterioro económico podría acabar rompiendo la excelente aceptación de los depósitos

El efecto pernicioso de la evolución de los mercados sobre los fondos de inversión, la escasa rentabilidad obtenida por aquellos más conservadores, los problemas de valoración de algunos de los fondos de renta fija y el incumplimiento de las rentabilidades esperadas de las categorías de retorno absoluto han desencadenado una fuerte oleada asimétrica de reembolsos durante el año. El resultado, la liquidación de muchos de los fondos que se han visto relegados por la ganancia de atractivo de otros activos, los depósitos. El entorno actual ha propiciado que los depósitos de alta remuneración hayan sido los productos estrella para los inversores. El elevado tipo de referencia de los mismos (Euríbor) y las crecientes necesidades de liquidez de las entidades financieras han fomentado el desvío constante de flujos desde los fondos hacia los depósitos.

No obstante, el intenso deterioro económico actual podría acabar rompiendo la excelente aceptación de los depósitos. Las bajadas de tipos del BCE, la reducción de las primas de liquidez, un posible descenso desde máximos de las primas de riesgo crediticias, así como la fuerte penalización en las valoraciones bursátiles están provocando que cada día los depósitos pierdan ese atractivo y que una ligera recuperación de los mercados pueda romper con esta tendencia. En cualquier caso, las rentabilidades que ofrecen siguen siendo muy superiores a las obtenidas por otros activos a corto plazo y, por tanto, sigue siendo recomendable aprovechar estas últimas oportunidades.

Unai de Juan y Sebastián Larraza son profesores de la Escuela de Finanzas Aplicadas, Afi.

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