El PSC e ICV discrepan sobre la presencia del oso pardo en los Pirineos
El PSC e ICV, socios en el Gobierno de la Generalitat, discrepan abiertamente sobre la presencia del oso pardo en los Pirineos. El programa de reintroducción de la especie, iniciado por Francia en 1996, no sólo ha provocado el rechazo de las autoridades y habitantes de la Val d'Aran, como se ha puesto de manifiesto tras el ataque de la osa Hvala a un cazador, sino que ha desencadenado discrepancias en el seno del tripartido.
El Gobierno catalán destinará 300.000 euros anuales al programa de reintroducción del oso. Su consejero de Medio Ambiente, Francesc Baltasar, de ICV, sostiene que el programa no puede cuestionarse por un "incidente aislado" como fue el ataque sufrido por el cazador de Les, el primero en 12 años. "Lo que tenemos que hacer es poner los medios necesarios para que no se repita", manifestó Núria Bonaventura, directora de Medio Natural.
Collserola
El consejero de Agricultura, el socialista Joaquim Llena, contrario a la presencia del oso, comparó ayer los sentimientos que despierta el animal entre los habitantes del Pirineo con el rechazo que generaría en la población si se soltaran osos en la sierra de Collserola, cerca del casco urbano de Barcelona. Llena aseguró que el problema radica en que la reintroducción del oso se hizo sin consultar al territorio. "Me gustaría que un Gobierno [alejado del territorio] decidiese poner el oso en Collserola. Entonces veríamos la que se liaba", dijo en declaraciones a COM Ràdio.
Llena añadió que muchas veces, sin mala intención, "se piensa por la gente del mundo rural y se quieren ordenar sus espacios". Llena, ex alcalde de Alt Àneu (Pallars Sobirà), municipio frecuentado por la población de osos, recordó que todos los ayuntamientos del territorio se mostraron contrarios a la reintroducción del plantígrado porque no fue una medida consensuada.
Las palabras de Llena fueron contestadas a través de un comunicado por ICV. El vicepresidente de esta formación, Jaume Bosch, calificó de "preocupante" el hecho de que un consejero de la Generalitat "muestre un desconocimiento tan grande de la realidad territorial de Cataluña y en concreto de la realidad metropolitana".
