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CARLOS MARTÍNEZ | Consejero delegado de Corporación Cibeles | nombres propios

Una solución rápida y casera

Poco ha tardado Caja Madrid en encontrar un relevo para Carlos Vega al frente de Corporación Cibeles. Y no ha tenido que ir muy lejos. Lo ha hallado en la casa. La comisión ejecutiva de la segunda caja de ahorros española ha propuesto a Carlos María Martínez, que ha desarrollado toda su carrera profesional en la entidad madrileña como consejero delegado de su brazo inversor.

Caja Madrid no podía tardar en sustituir a Vega y perjudicar más a uno de sus proyectos estrella para este año. A Martínez le espera ya la tarea de preparar Cibeles para su salida a Bolsa a finales de año si se cumplen los planes anunciados por la entidad presidida por Miguel Blesa. De momento, su constitución formal como holding ya ha sido aplazada a septiembre, cuando la previsión inicial era hacerlo en este mes de julio.

El nuevo ejecutivo tendrá que preparar a la sociedad para salir a Bolsa

Cibeles será así la segunda corporación financiera cotizada de una caja de ahorros, tras Criteria -de La Caixa-. Y un nuevo paso de las cajas de ahorro en Bolsa, tras el estreno en el parqué que ha protagonizado la CAM con sus cuotas participativas.

Esta misma semana Caja Madrid ha continuado preparando Cibeles para su salida a Bolsa. Ha adquirido el 60% que todavía no poseía en la hipotecaria mexicana Su Casita por 380 millones de dólares (unos 240 millones de euros).

Además de Su Casita, en la cartera de Cibeles la caja agrupará el banco privado Altae, Caja Madrid Bolsa y sus gestoras de fondos de inversión y pensiones, así como sus participaciones en la aseguradora Mapfre, en el banco de Florida City National Bank. Queda excluida de la cartera el 23% que la caja tiene en Iberia.

Según los cálculos de la entidad, los activos de Cibeles están valorados en unos 2.000 millones. Así, Caja Madrid prevé recaudar unos 600 millones en la operación, ya que sus planes son sacar al mercado en noviembre el 30% de la corporación.

Martínez, de 58 años y padre de tres hijas, se ocupaba desde 2000 de gestionar los fondos de la obra social de la caja de ahorros, unos 300 millones de euros. Antes, en su dilatada carrera en Caja Madrid, había trabajado en el departamento de Operativa Internacional y en la Dirección de Negocio de Banca Corporativa, desde donde pasó a ser director general adjunto de Banca de Negocios y, por último, director de Empresas e Instituciones.

Su llegada sucede a la polémica que ha rodeado el viaje de ida y vuelta de Carlos Vela entre Caja Madrid y Martinsa-Fadesa. Vela era el responsable de empresas en la entidad financiera cuando Caja Madrid decidió dar un préstamo a la inmobiliaria. En abril de 2007 se marchó a Martinsa para ser su consejero delegado, cargo que abandonó -para hacerse cargo de Cibeles- días antes de que la empresa de Fernando Martín solicitara el concurso de acreedores.

Así que "ante las circunstancias provocadas tras el concurso de acreedores de Martinsa-Fadesa", según sus propias palabras, Vela decidió dejar Cibeles. Con esta decisión, el directivo pretende no perjudicar al futuro holding, según la versión de Caja Madrid.

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