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Crónica:35ª jornada de Liga
Crónica
Texto informativo con interpretación

Dos goles de Renato hunden al Valladolid

Con una actitud propia de Saturno, el Sevilla se impuso al Valladolid al tiempo que masticaba a algunos de sus propios futbolistas. Poulsen lleva semanas que no da una, pero se ha caído de la convocatoria precisamente en la semana que la directiva decidió airear unas presuntas negociaciones con el Barcelona de las que, quien más, quien menos, incluido el club, sabía desde hace meses. No conviene olvidar que el danés llegó al Sevilla tras dejar tirados al Inter y el Milan y haber firmado un precontrato con el Villarreal.

Bajo el otro colmillo estaba Luis Fabiano, que escuchó desde el banquillo cómo Güiza le adelantaba en la tabla provisional de los máximos goleadores. Cuando saltó al césped, lo que escuchó fueron silbidos y gritos de pesetero provenientes de una afición harta de un jugador ventajista y hasta chantajista con su fútbol. Pero el Sevilla ganó, y eso era lo importante para mantener a tiro el objetivo de clasificarse para la próxima edición de la Liga de Campeones.

SEVILLA 2 - VALLADOLID 0

Sevilla: Palop; Alves, Fazio, Escudé (David Prieto, m. 40), Crespo; Maresca (Luis Fabiano, m. 60), Keita; Navas, Renato, Capel; y Kanouté (Koné, m. 77). No utilizados: De Sanctis; Dragutinovic, De Mul y Duda.

Valladolid: Asenjo; Pedro López, Baraja, García Calvo, Marcos; Camacho (Borja, m. 72), Álvaro Rubio; Sisi (Aguirre, m. 55), Víctor (Ogbeche, m. 82), Sesma; y Llorente. No utilizados: Alberto; Kome, Capdevila y Alexis.

Goles: 1-0. M. 9. Renato. 2-0. M. 40. Renato.

Árbitro: Mejuto González. Amonestó a Alves, Baraja, Marcos, Rubio y Borja.

Unos 30.000 espectadores en el estadio Sánchez Pizjuán.

Y se impuso el Sevilla gracias a los goles de un futbolista que apenas ha contado este curso y con el que no se cuenta para el que viene. Renato aprovechó el segundo meneo de una jugada que empezó con un balón colgado al área de Alves, que se paseó hasta Capel, quien la volvió a colocar en la olla para que errara el remate Kanouté y lo embocara con pillería Renato. El brasileño también marcó el segundo después de correr un pase al hueco de Maresca y regatear al portero.

El Valladolid también tuvo sus oportunidades, particularmente por medio del trabajo de Llorente. Pero le faltó el gol. Como a Luis Fabiano, que seguro que no entendía por qué le silbaban los suyos.

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