Veinte años y medio por matar a una joven y traficar
El asesino de Samira Sayegh ha sido condenado a 20 años y medio. La sección segunda de la Audiencia de Valencia considera que Rufino Martínez González es responsable de la muerte de la joven y por el delito de homicidio fija una pena de 12 años y seis meses. Se añaden seis años de prisión por un delito contra la salud pública derivado de la droga que encontró la policía en su casa. El condenado tendrá que indemnizar con 180.303 euros a los padres de la víctima.
Según consta en el fallo, entre las 23.00 del 31 de mayo de 2005 y las dos horas siguientes, Rufino Martínez se encontraba en su casa en compañía de Samira Sayegh, con quien la sentencia dice que mantenía una relación sentimental a pesar de que la familia insiste en que no era así. Entre ambos hubo una pelea en la que el procesado golpeó a la víctima en el cuello y la cabeza hasta causarle la muerte. Al día siguiente, después de comprar los enseres necesarios, el condenado descuartizó a la joven y fue metiendo sus restos en pequeñas porciones que tiró en bolsas de supermercado a la basura. Rufino Martínez admitió que la descuartizó, no que la mató. Dijo que se murió de repente y que se asustó porque tenía droga en casa y no quería avisar a la policía.
