El juez ve indicios de delito en dos hijos de Mas Canosa por el 'caso Sintel'
El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz decidió ayer, seis años después de que se iniciara el proceso, transformar en procedimiento abreviado el caso Sintel, por delitos fiscales e insolvencia punible, contra ocho imputados. Entre éstos, destacan Jorge y Juan Carlos Mas Santos, ciudadanos estadounidenses, hijos del empresario cubano-estadounidense Jorge Mas Canosa, ya fallecido, y que en 1996 adquirió Sintel a Telefónica por 4.500 millones de pesetas.
El magistrado señala que los Mas y otros directivos, como Juan Antonio Casanova, José Miguel Sariego, Ricardo Campos, Joel Tomás Citron, Pedro José Novela y Alfredo Flórez "guiados por el ánimo de obtener un beneficio económico a costa del patrimonio de Sintel (Sistemas e Instalaciones de Telecomunicación SA) (...) coadyuvaron conscientemente al desmantelamiento patrimonial de lo que era Sintel con el desgajamiento de sus sociedades filiales, todo ello con incumplimiento de las obligaciones tributarias de llevanza de la contabilidad mercantil o libros o registros fiscales".
El fiscal y las acusaciones disponen ahora de 10 días para solicitar la apertura de juicio oral, y presentar escrito de acusación.
El juez Pedraz ha dictado también un auto de sobreseimiento por el que exculpa de responsabilidad a otros 16 querellados, entre los que figuran los que fueron responsables de Telefónica en aquellas fechas, Cándido Velázquez-Gaztelu o Heliodoro Alcaraz. El magistrado precisa que no hay indicios de que hubiera "inteligencias fraudulentas" de Telefónica en la descapitalización de Sintel, "otra cuestión es la ética o moral". El juez afirma que la crisis generada en Sintel no puede imputársele a Telefónica y que no hay datos que avalen que Velázquez y Alcaraz "supieran" que, años más tarde, Mas no iba a pagar.
