Rusia conquista el fondo marino del Polo Norte en busca de nuevos recursos
El deshielo y el cambio climático suscitan una carrera por la riqueza del Ártico
La pugna por la explotación de los inmensos recursos del Polo Norte ha comenzado. Dos minisubmarinos descendieron ayer a más de 4.000 metros de profundidad y plantaron una bandera rusa de titanio en el fondo del océano Glacial Ártico. Es mucho más que un gesto simbólico: el deshielo provocado por el cambio climático permitirá en las próximas décadas alcanzar nuevos recursos. Moscú pretende ampliar su zona económica, ya que quiere demostrar que esas amplias extensiones son continuación de su plataforma continental.
_