Castilla-La Mancha dará una ayuda anual de entre 400 y 1.000 euros a jubilados con pensiones más bajas

La primera medida del Gobierno de Castilla-La Mancha, del PSOE, en esta legislatura será aprobar una ayuda anual de entre 400 y 1.000 euros "para las pensiones de viudedad más bajas y a todos los pensionistas que cobran menos". Lo anunció ayer, en su discurso de investidura, el socialista José María Barreda, que hoy será reelegido presidente regional tras la mayoría absoluta obtenida en las elecciones autonómicas celebradas el pasado 27 de mayo.

En un discurso de hora y media, que comenzó con un minuto de silencio -en homenaje por los seis soldados muertos el domingo por la tarde en Líbano-, Barreda sentenció que "Castilla-La Mancha no es nada sin España" y que él sólo antepondrá una cosa a la defensa de los intereses de la región: la defensa de España.

Así se recoge, manifestó, en la propuesta de reforma del Estatuto que la Cámara regional aprobó por unanimidad en la legislatura pasada y que está pendiente de su toma en consideración en el Congreso de los Diputados. Pero el presidente quiso subrayar algo: en la pelea por el agua, la comunidad de Castilla-La Mancha no se dejará arredrar.

En la propuesta de Estatuto de autonomía se fija la fecha de 2015 para la finalización del trasvase Tajo-Segura. "Exigimos lo que nos corresponde. Castilla-La Mancha pinta, y esto parece que incomoda a algunos con afán trasvasista, que se preguntan: '¿Qué pintan estos ahora incordiando en una cuestión que tan bien nos iba?'. Pues bien, Castilla-La Mancha ya no es tierra de paso, sino de peso; ya no está indefensa, sino que tiene la capacidad de defenderse a sí misma. Esto es lo que está pasando, y cuando antes lo entiendan, mejor", retó el presidente castellano-manchego.

Líneas estratégicas

En relación con esa política de agua, el presidente José María Barreda señaló que habrá dos líneas estratégicas: tratar de cambiar la legislación -"que nos perjudica"- y "exigir todas las obras" que necesita la comunidad autónoma, para que la falta de agua "no sea un factor limitante del crecimiento".

Además de las ayudas a pensionistas, Barreda anunció toda una catarata de medidas para este mandato: un plan extraordinario de conservación de carreteras, otro de desarrollo sostenible del medio rural, otro de adaptación al cambio climático -con el compromiso de que en el año 2012 toda la energía que se consuma en la región proceda de fuentes limpias-, reformas fiscales para ampliar las deducciones del IRPF y reducir la tributación en el impuesto de patrimonio, la plantación de 20 millones de árboles -"10 por ciudadano"-, la creación de un Centro de Investigación del Fuego y la extensión de la campaña de extinción de incendios a todo el año.