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Juicio por el mayor atentado en España

Tres conocidos etarras rechazan cualquier vínculo con los atentados del 11-M

"Yo no tendría que estar aquí", afirma uno de los condenados por la 'caravana de la muerte'

Los intentos de determinados abogados para implicar a ETA en el 11-M se desbarataron en 20 minutos de juicio. Los etarras Gorka Vidal, Irkus Badillo y Henri Parot rechazaron ayer cualquier vinculación con los atentados o con la célula islamista que se suicidó en Leganés. Los etarras llegaron a reírse de las preguntas de los abogados de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, empeñados en encontrar la conexión de la banda terrorista vasca con la matanza, y aseguraron que nunca han tenido contactos con islamistas ni tienen nada que ver con el 11-M. "Yo no tendría que estar aquí", concluyó Vidal.

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No es que los etarras sean testigos cuya palabra tenga la credibilidad de un teorema científico, pero es que en toda la investigación no ha aparecido un solo dato que permita avalar la autoría de ETA. Gorka Vidal e Irkus Badillo fueron condenados el pasado 10 de febrero a 22 años de prisión, cada uno, por su integración en ETA, haber intentado la colocación de bombas en las pistas de Baqueira Beret y haber trasladado desde Francia una furgoneta con más de 500 kilos de cloratita y Titadyn, que se conoció como caravana de la muerte y que iban a hacer estallar en un polígono industrial próximo de Madrid.

Ayer, ambos etarras evitaron contestar sobre los hechos por los que fueron condenados por lo que el presidente del tribunal, Javier Gómez Bermúdez, les apercibió con la imposición de una multa y la deducción de testimonio por delito de desobediencia.

Preguntado sobre si conocía a Jamal Ahmidan, El Chino, Gorka Vidal, respondió: "No tengo nada que ver con esto, ni tengo que ver con el 11-M, ni tengo nada que ver con los islamistas". Pero Manuela Rubio, de la AVT, no quedó satisfecha y preguntó: "¿Sabe usted por qué Jamal Ahmidan comentó: 'Estos de ETA se han pasado". Vidal se echó a reír con la pregunta.

El presidente le cortó: "Procure contestar con cierto decoro, aunque le haga mucha gracia. Estamos enjuiciando un hecho muy grave, independientemente de que le parezcan risibles las preguntas". Vidal respondió: "Pero si es que si me dice eso... Es que yo no tendría que estar aquí".

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Irkus Badillo siguió el guión del primero y también fue apercibido por el presidente. Negó la relación con islamistas y dijo que desconocía si algún miembro de ETA ha estado en campos de entrenamiento en Líbano con Hezbolá. Preguntado sobre el 11-M, Badillo respondió. "No tengo nada que ver con esos hechos", y aunque uno de los letrados le preguntó si condenaba los atentados, el presidente no le dejó responder.

Henri Parot, Unai, jefe del comando Argala de ETA, está condenado a 4.797 años de prisión, por su participación en 26 asesinatos consumados y 166 frustrados y lleva en la cárcel desde abril de 1990. Su testimonio fue más detallado, pero no menos tajante. Declaró que no conoce a Abdelkrim Bensmail, compañero de Allekema Lamari -uno de los suicidas de Leganés- que tenía apuntado en un papel que el etarra estaba preso en Córdoba, si bien nunca hubo correspondencia entre ellos.

Parot señaló que no habla árabe pese a haber nacido en Argelia, que no le consta que ETA haya contratado mercenarios ni que haya desarrollado un sistema para utilizar móviles como activadores de bombas. El etarra se echó a reír cuando el abogado José Luis Abascal le preguntó si no le había pasado la fórmula de la cloratita a Bensmail, con el que al parecer coincidió algo más de un mes en la cárcel de Alcalá de Henares. La cloratita se utilizó en los atentados del 11-M, sino Goma 2.

La intervención del abogado Juan Carlos Rodríguez Segura, de la AVT, siguió el mismo patrón. El diálogo fue el siguiente:

Rodríguez. En alguna prisión ha mantenido contactos con miembros del terrorismo islámico.

Parot. Que yo sepa, no. Me relaciono con los presos que me pone instituciones penitenciarias. No elijo con que presos voy a estar.

Rodríguez. Como miembro de ETA, e incluso como miembro de su dirección, ¿ha tenido conocimiento de alguna relación entre este atentado del 11 de marzo y su cúpula directiva?

Parot. No, para nada

Rodríguez. ¿Le han comunicado alguna orden en cuanto a relación con otros presos islamistas o que haya tenido alguien que ver?

Parot. Yo estoy preso. No sé que me está preguntando. No.

Rodríguez. Pero usted normalmente tiene una comunicación con ellos. Ha habido una sentencia en la que ha sido condenado por ello.

El presidente del tribunal aclara que la sentencia dice que tiene comunicación con la cúpula de ETA, pero no con islamistas.

Parot. Pues le contesto que no.

Rodríguez. ¿Ha tenido usted alguna comunicación con la cúpula dirigente en relación con el terrorismo islámico?

Parot. Pues no.

Y así, sin ni un sólo dato nuevo, concluyó la que iba a ser prueba decisiva sobre la tan investigada relación entre ETA y los islamistas. Fiasco absoluto de las tesis conspirativas.

El etarra Gorka Vidal, durante su declaración de ayer.
El etarra Gorka Vidal, durante su declaración de ayer.EFE / TVE

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