El desembarco del nieto del constructor

José Manuel Entrecanales Domecq, el hombre destinado a convertirse a los 44 años en el presidente de la mayor eléctrica española, procede de una estirpe de empresarios que se remonta a su abuelo José María, cofundador en 1931 de la constructora Entrecanales y Távora.

Hace tres años que el padre del prácticamente seguro futuro presidente de Endesa continuó en él una tradición familiar: ceder a su hijo el poder en la constructora; tal como el fundador había hecho 30 años antes con el padre de José Manuel.

En los tres años que ha estado al frente de Acciona (grupo resultante de la fusión en 1997 de Entrecanales y Tavora con Cubiertas y Mzov), los resultados le han acompañado: su valor en Bolsa se ha multiplicado por cuatro, hasta alcanzar los 10.300 millones de euros.

Antes de llegar a la cúspide de la empresa familiar, Entrecanales pasó por la presidencia de la antigua Airtel en sustitución de Juan Abelló. La venta de su participación a Vodafone le generó unas plusvalías de 1.622 millones de euros. "Entrar en Airtel fue una decisión excelente..., pero salir fue todavía mejor", confesó José María, el Entrecanales de segunda generación. A pesar de que la familia vendió sus acciones, José Manuel siguió como presidente de la filial española de la operadora.

Su continuidad en el cargo una vez que se había deshecho de su participación se explica en buena parte, según fuentes del sector, por las buenas relaciones que Entrecanales mantiene con la Administración. Con todas las administraciones. Él mismo dejó clara la filosofía del grupo en una ocasión, cuando le preguntaron su opinión por el entonces ministro de Fomento, del PP, Francisco Álvarez-Cascos. "Me parece el mejor hasta que llegue el próximo", respondió.

Entrecanales podrá desarrollar su pasión por el desarrollo sostenible con la nueva empresa dedicada a las energías renovables que resultará de la integración de los activos de Endesa y Acciona relacionados con estos asuntos. Este interés le llevó el año pasado a gastarse 150 millones de euros en Pridesa, empresa líder en desalinización, y a suscribir el mayor acuerdo mundial de producción de biodiésel, con una inversión estimada de 300 millones.

Ya en septiembre de 2006 dio una sorpresa al gastarse 3.388 millones en el 10% de Endesa; pero el golpe de efecto que casi finiquita la lucha por la eléctrica llegó el a finales del mes pasado. Entrecanales acordó entonces con Fulvio Conti, consejero delegado de la italiana Enel (participada en un 31% por el Estado), hacerse conjuntamente con el poder en la empresa codiciada por tantos. Fue entonces cuando las esperanzas de E.ON se desvanecieron.