Los pescadores de Barbate han recibido 100 millones en ayudas

El 30 de noviembre de 1999, Marruecos rechazó renovar el acuerdo pesquero que mantenía con la Unión Europea. 1.500 pescadores y sus familias dependían de ese caladero. Para hacer frente a estos siete años, se crearon oficinas de gestión de ayudas. La de Barbate (Cádiz, 22.000 habitantes) es la única que sigue abierta. Desde aquel 30 de noviembre, ha recibido más de 100 millones de euros.

La UE instrumentalizó medidas para el sector pesquero español que había dependido directamente del caladero marroquí. En Barbate se calcula que entonces el 70% de sus habitantes vivía de las ganancias que dejaban los barcos en puerto. La lluvia de ayudas que iban a llegar llevó al Gobierno andaluz a abrir oficinas de gestión, además de en Barbate, en Algeciras, Almería, Málaga y Punta Umbría. Se ofrecieron partidas a los armadores, que o bien querían modernizar sus barcos para afrontar nuevos destinos o bien querían desguazarlos para buscar nuevos retos fuera del mar. También a los pescadores, con ayudas puntuales para los que abandonaran el barco, los que quisieran montar otro negocio o los que pudieran prejubilarse.

Según los datos que maneja la Delegación de Agricultura y Pesca de Cádiz, los armadores barbateños modernizaron 13 barcos (573.552 euros) y paralizaron siete (3.036.785). 593 tripulantes se acogieron a ayudas destinadas a autoempleo. Son las conocidas como primas globales individuales que en Barbate alcanzaron los 3.676.535 euros. También hubo otro tipo de ayudas, las que encontraron algunos pescadores para abrir tiendas, bares o freidurías con las que se reconvirtió una treintena de marineros, que ascendieron a 1.566.393 euros. Además 47 tripulantes se prejubilaron, lo que supuso una partida de 1.743.431 euros.

A estas ayudas gestionadas directamente por la oficina de gestión de Barbate se suman las inversiones que la Unión Europea aprobó para la localidad a través de los fondos IFOP y los directos por la no renovación del acuerdo pesquero con Marruecos para ayudar a la economía municipal con proyectos de comercialización, equipos portuarios o diversificación. 52 proyectos alcanzaron una inversión de 50.165.461,64 euros y unas subvenciones de 29.789.642 euros. A esta cifra hay que sumar las ayudas que llegaron para el puerto, unos 13 millones de euros, y los 757.000 euros para contribuir al desarrollo de la industria acuícola.

El delegado de Agricultura y Pesca de la Junta, Juan Antonio Blanco, asegura ahora que estas ayudas permitieron al sector "replantearse su vida".

Uno de los proyectos, quizá el más ambicioso, fue la puesta en marcha del polígono industrial El Olivar. Siete años después todavía no funciona aunque ahora, al menos, las máquinas trabajan para levantar las primeras naves. La más avanzada, una nueva planta para una industria conservera. "Este polígono será un referente en Andalucía para el sector pesquero", anuncia convencido el delegado de la Junta. Mientras, algunos armadores se preparan ya para el que se cree inminente regreso a Marruecos. De hecho, algunos están ultimando nuevos barcos con los que emprender ese viaje.