_
_
_
_
_
Reportaje:

Las galletas cambian de mano

Kraft se hace con el liderazgo del sector con la compra de United Biscuits

Con Fontaneda como buque insignia, las galletas han sido el eje en la actividad de United Biscuits en España. Tras la compra del negocio de la multinacional británica por Kraft, otra multinacional pasa de los sectores de cafés, quesos y salsas a liderar el mercado de las galletas en Portugal, con una cuota de mercado del 39% y del 26% en España.

La compra supone la formación de un grupo con una facturación de unos 700 millones y 11 plantas con más de 2.000 trabajadores

La decisión de Kraft de adquirir el negocio en el sur de Europa, España y Portugal, de United Biscuits, coincide con la aplicación por parte de la multinacional norteamericana de un plan de reestructuración anunciado en 2004 y diseñado por la firma matriz para su actividad en todo el mundo con una duración de tres años por el que se contemplaba el cierre de más de veinte plantas y la reducción de unos 6.000 empleos.

En España esa estrategia no se concretó en el cierre de ninguna planta, aunque se llevó a cabo un ajuste de plantilla con salidas voluntarias en el caso de la planta de Mahón. Kraft, con una facturación de unos 340 millones de euros, ha mantenido su actividad en sus cuatro plantas. Mahón se ha consolidado para la producción de queso fundido; la planta de Dos Hermanas, en Sevilla, en el sector del café; Zamora está destinada a la producción de queso fresco y curado, y la planta de Hospital de Orbigo, en León, para la producción de cremas, salsas y refresco en polvo. La actividad de grupo se basa en la cuota de mercado de marcas líderes en su segmento como El Caserío, junto a otras también con una fuerte presencia como Saimaza en cafés, Milka y Toblerone en chocolates, Philadelphia o Tranchettes en quesos, Santé o Suchard.

Frente a una estrategia de estabilidad en el sector, United Biscuits ha desarrollado por el contrario en los últimos años una política de reestructuración e inversiones en la mayor parte de sus plantas tanto en España como en Portugal. Entre las decisiones más polémicas del grupo se halla la venta de la fábrica de Fontaneda a la empresa española Siro, tras muchos meses de negociación en donde, como primera salida, se planteaba el cierre de la planta. La multinacional británica se quedó con la propiedad de la marca. La estrategia del grupo en el sector galletero supuso un proceso de reordenación de las plantas para la producción de galletas, potenciando las plantas de Navarra y País Vasco así como la planta de Portugal. Esta política de inversiones se ha desarrollado igualmente en las otras líneas de actividad y muy especialmente en la producción de patés y conservas con la construcción de una nueva planta en Mérida, Badajoz, con una inversión de unos 15 millones de euros para consolidar un grupo con una facturación de unos 350 millones de euros.

Con la compra de United Biscuis por parte de Kraft, la multinacional norteamericana recupera para su utilización marcas de galletas como Oreo, Ritz y Chips Ahoy, que en su día pertenecieron a Nabisco y que en la actualidad estaban siendo utilizadas por parte de la firma británica para su comercialización en Europa, África y Oriente Próximo. Kraft, a escala industrial se hace con una planta en Montornés del Vallés, Cataluña, para la fabricación de postres en polvo, tres plantas para la producción de galletas en Vizcaya, Navarra y en Portugal y dos plantas para la producción de tomate, conservas y patés en Badajoz. Junto a esta estructura industrial, la compra supone para Kraft la incorporación a su oferta de una serie de marcas importantes en el sector alimentario como Fontaneda, Artiach, Marbú o Chiquilín en galletas en el mercado español, y Triunfo en Portugal, Apis en tomate, Fruco en zumos o Royal en postres.

Sobre las ventas totales de United Biscuits en España, el 65% corresponde al sector de las galletas; un 20%, a postres en polvo, y el 15% restante, a conservas vegetales. La cuota de mercado que logra Kraft es del 76% en postres en polvo, el 26% en galletas y el 15% en las conservas vegetales.

Joan Casaponsa, actual director general de United Biscuits.
Joan Casaponsa, actual director general de United Biscuits.ANDRÉS GARCÍA

Dos multinacionales conocidas

La operación de compra de United Biscuits por parte de Kraft ha sido valorada en 835 millones de euros. Sin embargo, su ejecución no ha supuesto para la multinacional norteamericana ningún desembolso al asumir una deuda de los británicos de 428 millones de euros y pagar la parte restante con el 25% que ya poseía en el grupo europeo. El hecho de que Kraft ya estuviera en el accionariado de United Biscuit y que tras la compra de Nabisco por Kraft pasara el negocio europeo a United Biscuits da a esta adquisición el aire de una operación amistosa entre viejos conocidos.

La compra, que se concretará en los próximos meses, supone, sin embargo, la apuesta clara por el mercado de la península, y sobre todo de España, con la formación de uno de los primeros grupos alimentarios con una facturación superior a los 700 millones de euros y una plantilla de más de 2.000 trabajadores distribuidos en 11 plantas de producción.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_