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Crónica:Fórmula 1 | Gran Premio de Gran Bretaña
Crónica
Texto informativo con interpretación

Inalcanzable Alonso

Portentosa demostración del español, que domina con autoridad y de principio a fin a Schumacher y Raikkonen

Oriol Puigdemont

Apercibido del despertar de los Ferrari, Fernando Alonso no se permite errores. Se evidenció de nuevo, esta vez en el circuito de Silverstone, la cuna del deporte del motor en Gran Bretaña, que es poco menos que infalible. A escasos veinte minutos del apartamento que habita en Oxford se enfundó su quinta victoria del año, la tercera consecutiva, en una carrera en la que se mostró inalcanzable para sus rivales.

Venció a todos Alonso en empuje pero también en consistencia y estrategia, un parámetro fundamental. El piloto español, de 24 años, se dibuja como uno de los que mejor identifica las exigencias que precisa cada pasaje de la carrera. Acelera cuando quiere abrir una brecha, como lo hizo hasta su primer repostaje, tras encadenar una serie de seis vueltas rápidas consecutivas a un ritmo imposible para el resto. Entonces regula su ritmo para conservar el propulsor cuando ya les ha dejado atrás, como hizo mediada la carrera, con una suculenta ventaja que superaba los once segundos.

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Impotentes, los demás contendientes deben resignarse a la huida del piloto de Renault. Poco importa que le persiga el finlandés Kimi Raikkonen, a vueltas con la inestabilidad mecánica que reside en el motor Mercedes de su MP4/21, o sea Michael Schumacher, siete veces campeón del mundo, quien trate de darle caza a bordo de su velocísimo Ferrari. El tándem formado por Alonso y Renault se muestra muy superior. No precisa donativos el vigente campeón para vencer, le bastan su calidad y su monoplaza. Pero es que, además, parece circular en bajada. Sus rivales, engrescados en sus refriegas, le facilitan una marcha que se plasma con un liderato cada vez más consolidado: tras las ocho primeras carreras, suma 23 puntos de ventaja respecto a Schumacher y 41 respecto a Raikkonen.

En Silverstone, fue Raikkonen quien partió segundo tras Alonso y quien taponó a Schumacher durante más de media carrera. Consciente del embotellamiento que iba a suponer el finlandés, se aplicó Schumacher en su intento por rebasarlo. Ya en el cuarto giro le mostró el alemán el morro de su Ferrari en una maniobra portentosa. Resistió Raikkonen. La brillante calificación de Ice Man se tornó como lo que se vaticinaba, un espejismo. Kimi pasó apuros para retener las acometidas del Kaiser hasta que finalmente éste, en un segundo repostaje perfecto, se libró del muro que le impedía progresar. Entonces sí liberó el alemán el inmenso potencial que, tras las modificaciones en aerodinámica, suspensiones y motor que han incorporado los Ferrari, y enlazó una serie de giros a muy buen ritmo. Para entonces ya era tarde. Alonso le aventajaba en más de doce segundos, un mundo.

Con la labor más peliaguda ya cumplida, Alonso se limitó a conservar el propulsor de su R26 para ahorrarse el riesgo de una hipotética calamidad técnica. Es tal el estado de gracia que atraviesan Alonso y su bólido que, incluso entonces, cuando bajó un punto su presión sobre el motor, los tiempos que registró fueron parejos a los de sus más directos rivales, circulando éstos con la lengua fuera para tratar de barrerle metros. Aunque de ellos parece que sólo uno, Schumacher, está en condiciones de aguantar el endiablado impulso del asturiano.

Aunque lo tendrá difícil el alemán si Alonso sigue completando fines de semana tan brillantes como éste en el que se llevó el triunfo en la carrera y se anotó la vuelta rápida tras haber logrado la pole position. Es lo que se ha dado en llamar hat trick. Es el primero que alcanza el piloto asturiano en una imparable carrera en la que no pasa día sin que alcance nuevos objetivos y en la que acumula ya un título, 13 victorias y 31 podios, los últimos 14 de manera consecutiva.

Michael Schumacher y Fernando Alonso se rocían con champaña en el podio de Silverstone.
Michael Schumacher y Fernando Alonso se rocían con champaña en el podio de Silverstone.ASSOCIATED PRESS

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