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Entrevista:JACKIE STEWART | Tres veces campeón del mundo de F-1 | Fórmula 1 | Gran Premio de España

"Alonso es tan joven y ha hecho ya tanto que acabará siendo el mejor del mundo"

Aunque tiene 67 años, Jackie Stewart (nacido en Dumbartonshire, Escocia) mantiene una vitalidad poco común. Triple campeón mundial de F-1 (1961,1971 y 1973), sufrió un accidente en el que su coche se incendió y tuvo que ser rescatado por su compañero de equipo, el BRM, Graham Hill, en 1966. Salió ileso pero vio fallecer a muchos amigos durante su carrera y mantuvo una batalla personal en pos de la seguridad de los pilotos. Ahora, con un bagaje impresionante a su espalda, Stewart habla del pasado y del presente. Afirma que no le sorprendió el título que Fernando Alonso ganó el año pasado porque le considera un gran piloto.

Pregunta. En 1953 su hermano Jimmy sufrió un accidente en Le Mans y sus padres intentaron alejarle de las carreras. Se habría perdido un gran campeón.

"Schumacher va a hacer mucha presión, lo dará todo. Y Alonso vivirá nuevas experiencias: a veces el miedo a perder te impide concentrarte en ganar"
"En 1963 piloté sin que mi madre lo supiera porque competía con otro nombre. Durante toda mi carrera mi madre dijo que yo no era piloto de competición"
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Michael está muy fuerte

Respuesta. Sí, mi padre no era el problema; era mi madre. Cuando mi hermano sufrió ese brutal accidente y al año siguiente otros dos, mi padre decidió que me apartara de las carreras de coches, porque mi madre lo pasaba fatal y padecía de los nervios. En esa época el deporte del motor era muy peligroso. Y ella dijo: 'con uno en la familia es más que suficiente'. Para mí no fue un problema, porque yo competía entonces en tiro y era bastante bueno. Sin embargo, en 1962 o 1963 piloté otra vez sin que mi madre lo supiera porque competía con otro nombre. Durante toda mi carrera mi madre dijo que yo no era piloto de competición. Y cuando terminé mi carrera fui a verla para decirle 'quiero que sepas que me retiro'. Y ella me respondió: 'es lo mejor que has podido hacer'.

P. Tras su accidente, su aportación fue clave para desarrollar la seguridad de los pilotos.

R. Todos pensamos que los accidentes los sufrirán sólo los demás. Pero cuando tienes uno, de repente te das cuenta de lo vulnerable que eres, de lo malas que eran las instalaciones médicas, de lo peligrosa que era la pista. Allí no había nadie, ningún comisario, ningún médico, ningún personal de urgencias y para mí eso era ridículo. Sin embargo, antes no le había dado importancia. Entonces empecé mi campaña en favor de la seguridad. Desde 1966 hasta que me retiré e incluso después luché por todo eso: las escapatorias, las estructuras deformables, mejores cinturones de seguridad, cascos y trajes y, en definitiva, mejores coches. Hoy todo es muy seguro. La prueba es que han pasado más de 12 años desde que murió el último piloto en accidente en la F-1 (Senna, en 1994). Ahora se circula a 300 por hora, se tiene un accidente y los pilotos salen caminando del monoplaza. Es fantástico.

P. Su batalla no resultó sencilla. ¿Contra quien debía luchar, contra la FIA, contra Ecclestone?

R. Cuando luchaba en defensa de la seguridad iba contra los que mandaban, porque ellos no querían cambiar nada; contra los dueños de los circuitos, que no querían gastar dinero. No resultaba fácil. Algunos pilotos me ayudaban, pero otros decían 'no, no, yo soy piloto de competición y asumo los riesgos'. La mayoría entendíamos que sólo permaneciendo unidos podíamos avanzar.

P. ¿Le gusta más la F-1 actual que la que vivió como piloto?

R. Sin duda. Todo es mejor: las instalaciones, los patrocinadores, los equipos, los grandes fabricantes. Tengo muy buenos recuerdos, pero también malos. Mucha gente piensa en aquellos buenos tiempos, pero quizás eran los malos tiempos.

P. Cobró sólo 4.000 libras por su primer contrato en F-1, ahora esa cifra parece ridícula.

R. Lo es. Pero luego percibí 7.500 y acabé ganando mucho dinero, porque no sólo corría en la F-1 sino en muchas otras competiciones. Creo que en 1968 gané 100.000 libras. El director general de una de las compañías más importantes de Inglaterra ganaba entonces unas 15.000. Hice mucho más dinero en los negocios que en las carreras. En 1971 ganaba más de un millón de libras al año.

P. Volvió a la F-1 en 1997 como propietario del equipo Stewart.

R. Fue el mayor desafío de mi vida, mucho mayor que competir. No compré ningún equipo, lo creé y tuve que buscar a la gente adecuada, acoplarla y producir el éxito. Necesitaba mucho dinero para seguir y opté por vender el equipo a Ford-Jaguar. Ahora sigo relacionado con la F-1 gracias a mi contrato con el Royal Bank of Scotland, que patrocina a Williams.

P. ¿Qué le parece Alonso?

R. Es increíblemente maduro para sus 24 años. Esa es su gran fuerza. Me impresiona mucho. Es un muy buen conductor y tiene muy buena cabeza. Conduce bien, su equipo es bueno, la dirección del equipo también, le dan buen material. Creo que va a estar ahí arriba durante mucho tiempo.

P. Algunos pilotos afirman que conduce de forma particular.

R. Técnicamente conduce muy bien. Creo que hoy por hoy es el piloto más consistente. Quizás se parece más a Schumacher que a Raikkonen. Como es tan joven y ha hecho ya tanto, probablemente acabe siendo el mejor del mundo.

P. ¿Le sorprendió su título?

R. Para mí fue una gran combinación entre un piloto joven fantástico y un equipo excelente. Trabajaron juntos tan bien que era muy fácil imaginar que acabarían ganando. Y esta temporada es un claro aspirante de nuevo al título. Aunque pienso que Schumacher va a hacer mucha presión, lo dará todo. Y Alonso vivirá nuevas experiencias: a veces el miedo a perder te impide concentrarte en ganar.

P. ¿Qué piensa que le está ocurriendo a McLaren Mercedes?

R. McLaren ha construido una nueva fábrica extraordinaria y eso distrajo a algunas de sus mentes pensantes, como Ron Dennis. Si piensas en el negocio, no estás centrado en las carreras y eso supone no prestar atención a detalles. McLaren puede volver porque tienen la capacidad, la gente y las instalaciones para hacerlo. Pero no es fácil.

P. ¿Cree que Ferrari mantendrá este nivel todo el año?

R. En Ferrari la gente se quemó. Durante cinco años consecutivos no tuvieron un fin de semana libre. Sólo trabajo, trabajo, trabajo. Ni mujer ni hijos, ni vacaciones en familia. Sólo presión y más presión. Los humanos tenemos un límite. Les han pagado mucho dinero y de repente se pueden permitir unas largas y costosas vacaciones pero no pueden hacerlas porque no tienen tiempo. Hasta que dicen basta. Cuando eso ocurre, el rendimiento baja. Están cansados. Así transcurrió el año pasado, pero parece que han vuelto muy fuertes.

P. ¿A qué pilotos ve más punteros de cara al futuro?

R. A Rosberg, Raikkonen, Alonso, Webber. Y mirando más lejos, a Hamilton y no sé si a Piquet. Tal vez Hamilton vaya más lejos, porque su padre no tiene dinero y él tiene hambre y un talento natural. Necesita tener éxito. El padre de Piquet es ya muy rico.

P. ¿Está de acuerdo con la política de reducción de gastos que promulga Max Mosley, presidente de la FIA, a partir de 2008?

R. No. Ya he dicho que en los años 20 y los 30 si querías ganar gastabas dinero. Llegó Hitler y quería que los alemanes ganaran y les dijo a Mercedes Benz y a Auto Union: 'gastad el dinero y ganad. Batid a Alfa Romeo y a los franceses'. Así que se gastaron el dinero. En los cincuenta, Mercedes Benz quería ganar y ficharon a Fangio y a Moss. Después, Ron Dennis, Ferrari, Toyota, Honda, todo el mundo se ha gastado el dinero para ganar. Las grandes marcas le dirán a Mosley que hacen lo que quieren con su dinero y que lo invierten para ser competitivos, porque eso será lo que va a marcar sus propios límites en el campeonato.

Jackie Stewart, en el interior del box del equipo Williams en el circuito de Montmeló.
Jackie Stewart, en el interior del box del equipo Williams en el circuito de Montmeló.RODOLFO MOLINA

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