TCB anuncia una inversión de 535 millones si gana el concurso de la terminal del puerto

Las empresas finalistas en el concurso para la ampliación del puerto de Barcelona afilan sus ofertas. Terminal de Contenedores de Barcelona (TCB) -participada por la compañía de capital riesgo 3i y con el grupo Pérez y Compañía como accionista de referencia- anunció ayer un plan de inversiones en la futura terminal de carga por un importe de 550 millones de euros, con la garantía de financiación de Banco Sabadell y de los accionistas del grupo. El proyecto incluye la compra de maquinaria por 345 millones, 180 millones en obra civil y 25 millones más en servicios informáticos.

Junto a TCB, compiten por la nueva terminal de carga -93 hectáreas de superficie con capacidad para manipular más de 2,5 millones de contenedores anuales- las ofertas de Tercat y la china Hutchison, y la de P&O Dover Holding Limited (perteneciente a Dubai Ports) y la naviera francesa CMA CGM.

El proyecto de TCB prevé la creación de una sociedad mixta con Transfesa para incrementar el tráfico ferroviario -hasta el 23% del total del tráfico, frente al 6% actual-, y prevé el inicio de las operaciones en una parte de la nueva terminal en junio de 2008. La compañía tiene previsto crear seis corredores ferroviarios -tres de ellos internacionales- para ampliar el área de influencia del puerto hacia el sur y el centro de Europa, y ampliar el hinterland del puerto también hacia el norte de África.

Ante la saturación actual y la imposibilidad de seguir creciendo, el objetivo básico del puerto con la ampliación consiste en incrementar el tráfico de contenedores. A este respecto, TCB aduce "compromisos escritos con 6 de las 10 mayores navieras del mundo", explicó ayer Francesc Velayos, su consejero delegado. Velayos dijo que la infraestructura ferroviaria permitirá conectar 12 emplazamientos logísticos situados en la Península Ibérica, el centro y el sur de Europa. La facturación de TCB alcanzó 235 millones de euros en 2005.

Antes del 30 de junio

La Autoridad Portuaria de Barcelona (APB) recibió inicialmente 12 ofertas para gestionar la nueva terminal de carga, la mayoría procedentes de Oriente Próximo y el Sureste asiático. El objetivo es incrementar el tráfico de contenedores para competir con los puertos del norte de Europa, los preferidos incluso por los barcos que proceden de Asia y llegan a través del canal de Suez. La APB apunta que la inversión requerida ronda los 300 millones de euros, y tiene previsto fallar el concurso antes del próximo 30 de junio.

Hasta ahora, el puerto sólo ha dado a conocer las ofertas económicas de los tres aspirantes, que puntúan el 30% en el concurso. La de P&O es superior a la de sus rivales, pero a cambio TCB y Tercat aportan la superficie que ahora ocupan en las instalaciones portuarias.