Un divorciado, un piso
La Comunidad adjudica 248 viviendas de alquiler, 40 de ellas reservadas a separados legalmente
Una bola con el número 26 dio ayer suerte a Manuel Sánchez. Como él, otras 39 personas divorciadas o separadas obtuvieron un piso de alquiler a un precio máximo de 260 euros en un sorteo celebrado por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio. Ésta asegura que es la primera vez que una Administración pública española adjudica un cupo de viviendas sociales a personas que se han visto obligadas a abandonar su domicilio conyugal por una sentencia de separación o divorcio.
En el sorteo, la Comunidad otorgó un total de 248 pisos situados en el barrio de la Ventilla, junto a la madrileña plaza de Castilla. Además de las 40 viviendas destinadas a separados o divorciados, se han reservado otras 99 a menores de 35 años, 40 a mayores de 65 y nueve a discapacitados.
Para participar en el concurso se exigía a los solicitantes que su renta anual fuese inferior a 15.000 euros. De los 248 apartamentos, todos con plaza de aparcamiento, 167 disponen de dos dormitorios; 72, de uno, y nueve están habilitados para discapacitados.
