Messi tampoco jugará en el Barça B hasta que se pronuncie el CSD
Leonel Messi regresa hoy a los entrenamientos del primer equipo del Barcelona. Vuelve de Paraguay, donde debutó en partido oficial con Argentina el pasado domingo y lo hace consciente de que por mucho que se esfuerce, le espera la grada. Messi sabe que no jugará ningún partido oficial con el primer equipo del Barcelona y tampoco con el filial, en la Segunda B, por consejo de los asesores jurídicos del club. Messi, que sin embargo puede ser alineado en la Liga de Campeones, aguarda desesperado la decisión del Consejo Superior de Deportes, que debe desbloquear su situación burocrática.
Messi, que se incorporó a los infantiles de la cantera azulgrana en el año 2000, firmó contrato profesional con el Barça el pasado 28 de junio, en Utrech, durante la concentración del equipo en Holanda, cuatro dias después de cumplir 18 años, mayoría de edad legal en España, pero está inscrito como jugador del filial en condición de "asimilado". Con ese término se viene reconociendo a los jugadores extracomunitarios que hayan militado en categorias inferiores, por lo menos desde infantiles, o acrediten cinco años de residencia continuada en España. En base a la interpretación del redactado de esos artículos, el Barça alineó a Messi la pasada temporada en siete encuentros de Liga.
Por ambigua, la ley se prestaba a interpretaciones contrarias, hasta el punto del que en el Barça se da por sentado que cualquier club que hubiera impugnado un partido en el que participara Messi la temporada pasada "habría generado un conflicto legal de difícil solución". Consciente de ello, la RFEF modificó el artículo 116 y, en base al Real Decreto de octubre de 1999, dará vigencia legal al artículo tan pronto sea ratificado por el CSD.
La junta que preside Joan Laporta cree que antes de que finalice el mes de septiembre el problema tendrá una solución favorable. No parece tan convencido como el club el padre del futbolista, que insta a una salida "inmediata". Al tiempo, el Barcelona ha inciado los trámites pertinentes para que Leo Messi adquiera la nacionalidad española.
El que fue considerado el pasado mes de junio mejor jugador Sub 20 del mundo no puede jugar la Liga española. Perdido en un laberinto legal, Messi ve cómo su carrera deportiva pasa antes por los despachos que por los terrenos de juego.
