Comienza en Perú el juicio por la guerra sucia del principal asesor de Fujimori
Vladimiro Montesinos y el general retirado Nicolás Hermoza, dos de los personajes más poderosos del Gobierno peruano del ex presidente Alberto Fujimori, y los miembros del escuadrón de la muerte Grupo Colina compartieron ayer el banquillo en la Sala Penal Anticorrupción. Los 57 procesados deberán responder por el asesinato y desaparición de 35 personas en los casos de La Cantuta, Barrios Altos y El Santa, y del periodista Pedro Yauri. El fiscal pide 35 años de cárcel para los implicados.
En la Base Naval del Callao, donde se encuentra recluido Montesinos -ex jefe de los servicios secretos de Fujimori- se ha construido una sala especial para el juicio. Hasta allí debían ser trasladados, desde distintos penales del país, los otros acusados de haber dirigido e integrado el Grupo Colina. Sólo llegaron 40. De los 17 restantes, algunos están prófugos, otros se declararon enfermos.
El desafío, lo sabían bien tanto la presidenta de la sala, Inés Villa, como el fiscal, Pablo Sánchez, sería celebrar la primera sesión del proceso. No se equivocaron. La defensa intentó por todos los medios dilatar el inicio de la vista.
Fueron tres horas de peticiones -algunas ridículas- que la magistrada tuvo que sortear con destreza. Todos con el argumento de suspender la sesión hasta que esté garantizado el derecho a la defensa.
Por ejemplo, Estela Valdivia, abogada de Montesinos, explicó que había recibido la acusación fiscal en disquete, pero en un formato que su ordenador no podía reconocer. Por su parte, la defensa de los ex jefes del Servicio de Inteligencia del Ejército, los generales retirados Luis Cubas Portal y Juan Rivera Lazo, solicitaron el aplazamiento debido a que estaban internados en el Hospital Militar desde el 20 de julio y 4 de agosto, respectivamente.
Los tres jueces que integran la sala, sin embargo, fueron inflexibles. Tras varias horas de peticiones y resoluciones, finalmente dieron por iniciada la vista pública. Y a la defensa sólo le quedó acatar la decisión.
Éste, sin duda, es uno de los procesos más importantes contra la organización criminal liderada por Fujimori y Montesinos en la década de los noventa. El expediente principal tiene más de 50.000 páginas y en éste se demuestra, según declaraciones del fiscal Sánchez, la existencia del Grupo Colina. Un cuerpo especializado enquistado y promovido por el Ejército que ejercía acciones de inteligencia y también de selección, detención y eliminación de personas.
Fujimori es el gran ausente en este proceso.
