La prisión de Málaga sufre su tercera evasión en menos de un mes
Tres presos se han fugado de la sección abierta de la prisión provincial de Málaga desde finales de junio. El último caso ocurrió el jueves por la mañana, cuando un recluso que cumplía los últimos meses de una pena de ocho años aprovechó la apertura matutina de las puertas del recinto para echar a correr sin que los funcionarios consiguieran detenerle.
En los tres casos se trata de presos en tercer grado, que pueden salir del recinto durante el día y sólo deben regresar para dormir. Estos reclusos son trasladados desde la cárcel de Alhaurín de la Torre a las instalaciones de la antigua prisión provincial de Málaga, donde se han producido las fugas, para que completen su proceso de reinserción.
Fuentes penitenciarias han destacado la "escasa peligrosidad" de los huidos, así como su perplejidad por el hecho de que escapen cuando pueden salir informando a los funcionarios. En el último caso, el motivo de la evasión podría ser el temor del preso a una penalización por haber abandonado el trabajo que realizaba para reinsertarse.
El sindicato CC OO ha criticado la "laxitud" de Instituciones Penitenciarias en la concesión del tercer grado, que atribuye a una estrategia para reducir la superpoblación de presos en Málaga, cuyo número supera en más del 100% la capacidad carcelaria.
