_
_
_
_
_

La patronal europea del calzado exige medidas para controlar las importaciones asiáticas

Los empresarios acuerdan en la cumbre de Elche convocar una manifestación en Bruselas

El nuevo presidente de la Confederación Europea del Calzado, el español Rafael Calvo, anunció ayer tras la asamblea general de la patronal europea celebrada en Elche, la convocatoria de una manifestación en Bruselas el próximo 15 de junio, para exigir a la Comisión medidas concretas que frenen la entrada indiscriminada a los países de la Unión de calzado de los países asiáticos, en especial de China. Los empresarios denuncian que la denominada competencia amarilla no cumplen las normativas vigentes y, por tanto, los productos europeos están en desventaja.

Los empresarios entregarán a los miembros de la comisión un documento con sus peticiones y simbólicamente les entregarán las llaves de sus empresas para expresar que el futuro está en sus manos. La manifestación, según Roeland Smets, secretario general de la confederación, se convoca porque "estamos hartos de discursos y queremos ver acciones". Smets dijo ayer que hay que ser realistas y "en unos 5 años China será una potencia mundial, económica, financiera y militarmente. Nosotros tenemos que reaccionar y hay que entrar en ese mercado". Los fabricantes de calzado añadieron que hay que conseguir que los productos chinos cumplan las reglas del juego ya que "ni un solo objeto exportado a Europa está libre de algún problema, incumplimientos legales, falsificaciones de la marca, reglamentación sanitaria o copia de etiquetas". Añadieron que además la moneda china esta infravalorada en un 35%, lo que aún hace sus productos más competitivos. "Nosotros tenemos los mismos derechos que los chinos y parece que la comisión les tiene miedo, por eso vamos a luchar y solicitamos medidas urgentes, que se pongan en marcha antes de 6 meses".

Los países de la Unión europea cifran en un 9,8% el descenso de la producción en el último año, aunque este dato es mayor en los principales países productores que son, junto con España, Italia, Portugal y Polonia. Son los representantes empresariales de estos 4 países los que van a liderar la protesta, aunque el resto, según confirmaron ayer en la asamblea, se les unirán o bien enviarán cartas de apoyo a la protesta a los miembros de la comisión. La patronal europea del calzado solicitará también el apoyo del sector de los componentes, otro de los afectados por la crisis, y de los sindicatos y los comerciantes.

Representantes sindicales de CC OO y de UGT desarrollaron una protesta pacífica hasta el centro de congresos de Elche, donde se celebró la asamblea, y consiguieron reunirse con Rafael Calvo. Le hicieron entrega de un documento con sus reivindicaciones, que fue compartido y asumido por los empresarios. El documento sindical pide que se haga un esfuerzo por que Europa no desempeñe sólo un papel de distribuidor de calzado, si no que "se mantenga la fabricación y por lo tanto el empleo". También solicitaron que se cumpla escrupulosamente la ley para el control y penalización de las infracciones en materia de falsificaciones.

Zona de libre comercio

El Gobierno central impulsará la creación de una zona euromediterránea de libre comercio en 2010 y mantendrá mecanismos de vigilancia sobre las importaciones chinas, con el objeto de aplicar medidas de salvaguardia y desarrollo del sector del calzado español. Ambas líneas de actuación, junto a la ralentización del desarme arancelario en la UE hasta lograr la reciprocidad, especialmente en los países asiáticos, en materia de acceso al mercado, fueron ayer expuestas en Elche por el director general de Desarrollo Industrial del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, Jesús Candil, en la clausura de la Asamblea General de la Confederación Europea del Calzado (CEC).

Candil aseguró que las citadas líneas de trabajo del Gobierno central serán los ejes de la posición de España en el marco general de la negociación de acuerdos internacionales que permitan consolidar y reforzar al sector industrial del calzado.

En este sentido, dijo que su ministerio se ha dirigido a la Comisión Europea para manifestar su preocupación por las importaciones de calzado procedente de China, "ante el riesgo de que se avecine una situación similar a la que ya atraviesa el sector textil y de la confección".

La apertura de mercados y el respeto a las reglas del juego en el comercio internacional son ejes fundamentales de la acción del ministerio de Industria.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_