Subidón en los 800

A Mayte Martínez, la plata en el 800 metros, su segunda plata continental, le supo a plata. A Juan de Dios Jurado, jiennense de 23 años, el bronce en los 800, su primera medalla en su primera final de una gran competición, le supo a oro. A Antonio Reina, sevillano de 24 años, la medalla de plata, la primera medalla que consigue en su ya largo historial internacional, no le supo a nada.

A Juan Carlos Granados, el chico de Mayte Martínez, su entrenador, la medalla de su chica le supuso una jaqueca, un subidón de tensión, unas pulsaciones aceleradas y luego la paz. A Granados le preocupaba la fragilidad mental de Mayte, una atleta que en la pista es guerrera, peleona, luchadora, pero que antes de salir es la reina de los nervios. "Estaba preocupado, pero no tanto", dijo Granados. "El nerviosismo que le había visto a Mayte por la mañana era de los buenos".

La atleta vallisoletana hizo sufrir porque salió más lenta de lo necesario, porque las dos primeras vueltas de una carrera muy rápida (el 400 se pasó en 59,72s) las hizo entre empujones y codazos por la calle exterior, recorriendo diez metros más que sus rivales, porque sufrió parones y acelerones, porque se desgastó en exceso. Y sólo por su poderío, por su clase, se abrió camino entre dos de las rusas, entre las dos alemanas para ir a por la plata. Martínez, quien se perdió los Juegos de Atenas porque un ataque de vértigo en mayo le obligó a suspender sus entrenamientos dijo: "Habría firmado la plata antes de la carrera porque la rusa Czhao, la ganadora, es una atleta de 1.57, lo que yo no corro ni en verano".

Jurado y Reina son andaluces y de la misma generación, la del 81, la última que ha dado buen nivel al atletismo español. Desde cadetes han estado en la selección juntos y son amigos. Reina maduró antes, asombró más, logró mejores marcas, despertó más expectativas. Jurado, de desarrollo más lento, ha madurado después. Aún tiene peores marcas. Aún está creciendo. Como veterano desencantado recibió Reina su plata. Y como un joven maravillado ganó Jurado su primera medalla. Después de pelear. Gastar fuerzas en las curvas. Tenerlo todo perdido y volver a por ello. "Me falta experiencia", dijo Jurado, que se entrena en Jaén en una pista dura, pasando frío y calor. "Mientras se gastan los millones en un campo de fútbol. Todo es muy precario", dice Jurado.