El amor tahitiano de Marlon Brando
Tarita Teriipaia, la que fuera esposa de Marlon Brando, acaba de publicar en Francia su libro de memorias. Escrito con el periodista Lionel Duroy, Marlon: mi amor, mi sufrimiento cuenta que Tarita, hija de un pescador de Bora Bora y actriz de gran belleza, no se sintió impresionada por el actor cuando filmaban en Tahití Rebelión a bordo, pero que cedió durante la parte del rodaje que se realizó en Los Ángeles. Marlon es descrito como un tirano generoso, un hombre que era alternativamente violento y tierno. La relación, que se mantuvo a lo largo de 43 años, tuvo mucho de pesadilla: aunque se separaron, Brando no dejó de intervenir en la vida privada de Tarita, manipulando a distancia para frustrar sus intentos de rehacer su vida. Marlon también se fue distanciando de los dos hijos que tuvieron, Teihotu y Cheyenne, especialmente cuando ésta comenzó a tener problemas psiquiátricos. Pero sí acudió al rescate cuando Christian Brando, hijo suyo y de la actriz Anna Kashfi, mató al novio de Cheyenne (Christian fue condenado a 10 años de cárcel y Cheyenne se suicidó en 1995, con 25 años de edad). Según Teriipaia, en sus días finales, Marlon dio su bendición a la escritura del libro y reconoció que ella había sido el gran amor de su vida. Los restos de Marlon fueron esparcidos en Tetiaroa, el islote que compró en los mares del Sur.-