Varias granjas de pollos de Lleida, denunciadas por mal uso de un antibiótico
La fiscalía de Lleida ha presentado en el Juzgado de Instrucción de Tremp (Pallars Jussà) una denuncia por un presunto delito de fraude alimentario en el engorde de pollos en granjas integradas en la Cooperativa Agropecuaria de Guissona. Según las investigaciones, una veintena de explotaciones no suministraron el año pasado el pienso adecuado en la última fase del engorde de las aves.
La investigación se abrió el pasado verano tras descubrirse que los animales enviados al sacrificio por una granja de Tremp tenían un exceso de residuos de salinomicina de sodio, un antibiótico utilizado para prevenir la enfermedad de la coccidiosis. El antibiótico ha de ser retirado cinco días antes del sacrificio para que no llegue a la cadena alimentaria.
La cooperativa, que tiene más de 200 socios con contratos de integración, señaló ayer que todos los controles sanitarios privados y oficiales realizados en su matadero de aves "han sido negativos, sin encontrarse ningún residuo anormal en las aves sacrificadas".
